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Las plataformas de alquiler turístico lanzan sus redes sobre el cliente VIP

La espartana filosofía original de Airbnb -colchón hinchable y desayuno- se sofistica con la incorporación de servicios de lujo, desde ´tablets´ de última generación a ´personal shopper´

Las plataformas de alquiler turístico lanzan sus redes sobre el cliente VIP

Un colchón inflable y un desayuno. Ésta fue la sencilla oferta de alojamiento, casi espartana, que puso en 2007 los cimientos de Airbnb (acrónimo en inglés de airbed y breakfast). Ese año, dos de los fundadores de la compañía, Brian Chesky y Joe Gebbia, que vivían en San Francisco y necesitaban unos ingresos extra, alojaron así a tres asistentes a la conferencia anual de la Asociación de Diseñadores Industriales de Estados Unidos.

Lo que vino a continuación, con la incorporación de Nathan Blecharczyk como programador, es una historia ya conocida por todos. Hoy en día, Airbnb se ha convertido en un gigante de la economía colaborativa, que, sólo en Europa, prevé generar para 2020 un impacto económico de 340.000 millones de euros, y que ha puesto en guardia a gobiernos de todos los colores para regular este fenómeno.

Esa sencilla filosofía original ha cobrado también nuevas formas en los últimos años, potenciándose el mercado del alquiler turístico de lujo, al que se dedican en Mallorca empresas como Residence by G, que ofrece apartamentos de alta gama con Smart TV y camas con sábanas de algodón egipcio de 300 hilos, e inmobiliarias como Engel&Völkers, que tiene una división específica para este tipo de rentas de alto standing en la zona suroeste de Mallorca.

'Airbnb plus'

Hasta Airbnb ha pasado del colchón inflable y el desayuno del principio a crear una colección de alojamientos Plus en todo el mundo. Más de 300 apartamentos y casas que cumplen unos estándares de calidad más elevados que la media, incluyendo una atención prémium para responder de forma inmediata a las necesidades que le puedan surgir al huésped.

En España, de momento, este servicio sólo se ofrece en Barcelona, pero seguramente será sólo cuestión de tiempo que llegue a la isla, donde el mercado del alquiler de lujo, tanto el turístico como el de largo plazo es un hecho consolidado tal y como pone de relieve el último informe de mercado de Engel&Völkers. ¿Y quién es el turista tipo que opta por alojarse durante unos días en propiedades selectas? Desde Residence by G -que pertenece a Gomila Group Investment- informan de que suelen ser familias, viajeros de negocios y grupos de amigos. Buscan, sobre todo, la oferta gastronómica, cultural y comercial del centro de Palma. Abundan, según explican, los clientes escandinavos, seguidos de alemanes e ingleses, con una edad media entre los 30 y los 50 años.

El objetivo que se marca esta compañía es atraer un turismo de lujo y para ello cuentan, de momento, con una cartera formada por una docena de propiedades, tanto en Palma como en la part forana, que quieren seguir aumentando por lo que actualmente están buscando más propietarios interesados en ofertar sus casas.

Tarjetas 4G

La empresa de intermediación se encarga de la gestión integral del alquiler, así como de tramitar la preceptiva licencia turística y de equipar la propiedad de una forma exclusiva. "Dotamos a los apartamentos de infraestructura tecnológica, con unas 'tablets' con tarjetas 4G con las cuales el huésped puede hacer la compra, encargar un 'personal shopper' o pedir un masajista", explican desde la compañía.

Una interiorista se ocupa de decorar los alojamientos para dotarlos de una línea personalizada. Dentro de esa oferta, se da además la posibilidad de contratar servicios extra de lavandería, entrenador personal y de cesta de la compra a domicilio para que la "nevera siempre esté llena".

"Son como pisos cinco estrellas repartidos por la ciudad", apuntan en Residence by G, que hace hincapié en la idea de que se dirigen a un segmento de mercado al que no hay que asociar con la masificación para marcar diferencias de esta forma con la conflictividad asociada al alquiler turístico descontrolado.

"Es un tipo de turismo que busca integrarse en la ciudad y no aislarse en sus comunidades. Les gustan los recorridos culturales, ir de compras", informan fuentes de la compañía, que apuntan que el precio medio por noche durante el año pasado fue de unos 212 euros.

Diferentes zonas

Los precios de este tipo de alquileres varían en función de la zona de Mallorca en que esté ubicada la propiedad. El informe sobre el mercado inmobiliario de Mallorca presentado por Engel&Völkers recientemente informa, por ejemplo, de que en el norte de la isla se están alquilando casas desde 2.000 a 6.000 euros por semana.

Esta inmobiliaria alemana centrada en el mercado de las propiedades exclusivas constata que "las rentas de los alquileres pueden ser muy lucrativas si se dispone de toda la documentación en regla".

La realidad del Ponent

La compañía señala que en algunas zonas de la isla ha tenido tanta demanda de alquileres turísticos selectos que ha creado incluso una división específica. Es lo que ha sucedido en la comarca del Ponent (Calvià-Andratx), donde Engel&Völkers impulsó la Luxury Collection Mallorca, que presta al huésped un servicio personalizado en villas exclusivas.

"Estas villas tienen de 5 a 7 habitaciones, (además de ) piscina y amplias terrazas para comer y entretenerse al aire libre. Además, se complementan con un amplio abanico de servicios adicionales, como conserjería, avión privado y alquiler de embarcaciones", señala la agencia inmobiliaria.

En municipios de la Serra de Tramuntana como Valldemossa, Deià y Sóller, la compañía constata también una demanda de alquileres turísticos en fincas privadas exclusivas. Y refiere que, "cada vez más", los propietarios "regularizan sus inmuebles" para aprovechar el "altamente lucrativo" mercado del alquiler turístico.

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