La demanda de viviendas de lujo está creciendo en Mallorca a un ritmo tan acentuado que hasta este tipo de producto comienza a escasear, lo que además está provocando el incremento de unos precios que de por sí son acentuados, según se desprende del informe elaborado por la inmobiliaria Engel & Völkers. El impulso es tan notable que el valor de las ventas realizadas durante el pasado año se acerca ya al que se registraba antes de la crisis, aunque con un matiz muy significativo: en 2007, el 23% de ese dinero salía de bolsillos extranjeros, mientras que en este momento se llega al 44%.

En concreto, el valor de las ventas inmobiliarias de Balears durante el pasado año se situó en los 4.500 millones de euros, con un incremento del 26% respecto a 2016. De este total, 1.900 millones de euros procedían de compradores extranjeros, según se destaca.

Y esta evolución al alza está siendo especialmente intensa en el mercado del lujo. La propia Engel &Völkers aumentó sus ventas durante el pasado año un 40%, según han puesto de relieve los directores generales de esta inmobiliaria en Balears y en Mallorca Suroeste, Florian Hofer y Hans Lenz respectivamente.

La búsqueda de este tipo de producto y su escasez en la isla está haciendo que incluso exista ya demanda en zonas que hace algunos años no despertaban el interés de los inversores y que se están revalorizando, y se ponen como ejemplos la Platja de Palma o Cala Major. Hay un factor adicional que agrava la falta de producto disponible, según pone de relieve Hans Lenz, como es la paralización en la concesión de licencias para edificar nuevos chalés en aquellas urbanizaciones que todavía no disponen de alcantarillado, debido a que los ayuntamientos respectivos no han puesto en marcha el correspondiente proyecto para desarrollar esta dotación. Hay que recordar que entre las zonas afectadas se encuentra Son Vida.

¿La previsión para 2018? Los precios van a seguir subiendo de la mano de esa escasez de oferta.

¿Dónde nace ese interés? El cliente alemán sigue siendo el mayor demandante de este tipo de inmuebles en Mallorca, y concentra el 57% de las compras, seguido del británico con un16%, sin que el brexit esté frenando esta atracción. Los españoles, de la mano de la recuperación de la economía del país, suponen un 7%, seguidos del 5% de los suizos y el 4% de los suecos. A partir de ahí aparecen otras muchas nacionalidades, aunque se reconoce que la demanda rusa o china es casi inexistente.

Los precios más altos de la vivienda de lujo aparecen en el suroeste de la isla y en Son Vida. Así, el precio medio de una villa en el Port d´Andratx se sitúa en los 4,5 millones de euros, mientras que las propiedades de Bendinat y Puerto Portals alcanzan los 800.000. Desde esta inmobiliaria se pone de relieve que no hay otra zona de Mallorca en la que los inmuebles de alto nivel se estén encareciendo de una forma tan acentuada.

Respecto a Son Vida, se pone de relieve que las villas con vistas al mar también están alcanzando valores medios de 4,5 millones de euros, con el agravante de la paralización de licencias antes apuntada, lo que puede hacer que estos precios registren un apreciable aumento.

En el norte de Mallorca, y más concretamente en Formentor, también se está pagando ese importe medio de 4,5 millones por una villa. Igualmente, un apartamento de alto nivel en el Port de Pollença puede alcanzar un valor de 400.000 euros.

Palma concentra un 43% de las ventas del mercado mallorquín, y en su Casco Antiguo las viviendas más exclusivas pueden alcanzar un precio de 3,8 millones de euros, mientras que apartamentos de Ciudad Jardín o el Portixol pueden alcanzar los 800.000 euros.

En la zona occidental de la isla, y concretamente en Deià, se pueden llegar a pagar 3,5 millones de euros por un inmueble, y también destaca el interés existente por Valldemossa o el Port de Sóller.

El sur de Mallorca dispone de villas con vistas al mar cuyo valor alcanza los 1,9 millones de euros, mientras que en el interior de Mallorcaa se pueden pagar 1,8 millones por algunas villas clásicas. El entorno de Artà alcanza precios de 1,7 millones, y 1,6 millones en la zona de Santanyí.