La portavoz del Govern, Pilar Costa, acusó ayer al Gobierno de Mariano Rajoy de actuar con "irresponsabilidad" al usar el catalán como "un tema de confrontación", en referencia a la propuesta de que el castellano sea lengua vehicular en la educación en Cataluña y a las posibles consecuencias que podría tener en otras comunidades bilingües como Balears. "Lo que puede ser una confrontación partidista ante unas elecciones no debería usarse como elemento principal por parte del que gobierna" a la hora de tomar decisiones, declaró Costa en referencia al Gobierno central acusándole implícitamente de plantear estas cuestiones por interés electoralista.

La portavoz del Ejecutivo balear defendió la "riqueza" que supone la existencia de "distintas lenguas oficiales", algo que "debería ser respetado por todos porque, de lo contrario, en vez de avanzar hacia la normalización se estarían dando pasos atrás y echando más leña al fuego". Poco después de las declaraciones de Costa, el portavoz del Gobierno central, Íñigo Méndez de Vigo, confirmaba que se modificaría la resolución de la conselleria de Educación de Cataluña sobre el procedimiento de inscripción de nuevos alumnos para que los padres puedan elegir la lengua vehicular en la que quieren escolarizar a sus hijos.

Las intenciones del Gobierno central provocaron un alud de reproches desde Balears. A las críticas del Govern se unió la de Més per Mallorca cuyo portavoz, David Abril, acusó al PP de usar el artículo 155 para "pisar la educación y la convivencia" y sostuvo que "no es solo una amenaza a la educación catalana, sino a la de todos los territorios con lengua propia".

Sindicatos docentes de las islas como STEI y Alternativa criticaron las pretensiones del Gobierno central y reivindicaron la necesidad de que el catalán continúe como lengua vehicular. El STEI mostró su apoyo al modelo de inmersión "implantado en Cataluña desde 1983" y a los profesores "que han trabajado para devolver el lugar que le corresponde al catalán en la escuela". A su juicio, el Gobierno quiere "atacar el eje vertebrador del sistema educativo de Cataluña" por el "afán recentralizador del PP, que no se para y al que hay que plantar cara". El sindicato defendió que la inmersión garantiza el conocimiento de la lengua propia a los niños que en casa no la hablan y "el conocimiento del castellano a todos los alumnos".

Alternativa rememoró lo sucedido en Balears durante la pasada legislatura, cuando el Govern del PP introdujo la libre elección de lengua y se encontró con que la mayoría de familias escogieron iniciarse a la lectoescritura en catalán. "La respuesta del PP fue aplicar el TIL, que lejos de querer mejorar el aprendizaje del inglés quería hacer retroceder el catalán cuando no existía ningún problema". A su entender PP y Ciudadanos "utilizan el tema lingüístico para tapar otros temas como la corrupción" y consideró que usar un artículo "excepcional" como es el 155 para atacar un modelo educativo "implantado democráticamente" es "una extralimitación". Además, recordó que en Balears que la Llei de normalització y el Decret de Mínims fueron impulsados por el PP con el consenso del resto de partidos políticos.

Independentistas en Balears

En medio de la polémica por las intenciones del ejecutivo de Rajoy, la política lingüística en Balears no pasó por alto a dirigentes políticos nacionales. El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, afirmó que la protección de las lenguas oficiales en las comunidades bilingües "no implica que haya una lengua que se pretenda excluir como algunos independentistas o nacionalistas han pretendido hacer en Cataluña y pretenden ahora también con la misma estela en Balears".

Los exconsellers catalanes de Educación y Enseñanza Ernest Maragall e Irene Rigau también recordaron a Balears, aunque en su caso para poner las multitudinarias movilizaciones en las islas contra la política lingüística de Bauzá como ejemplo de la "respuesta" que puede dar Cataluña a la iniciativa del Gobierno central.