El presidente del Parlament, Baltasar Picornell (Podemos), se mostró ayer "orgulloso" de su trabajo durante su primer año en el cargo, del que resaltó las medidas para eliminar barreras entre las islas y abrir la Cámara balear a los movimientos sociales. "Quedan muchas cosas por hacer", admitió Picornell entre las que mencionó el Síndic de Greugues. "Estoy orgulloso de haber asumido este reto hace un año sin renunciar a ser el 'Balti' de siempre y representar a Balears de forma cercana y dialogante", concluyó.