La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, calificó ayer de "dantesco" que el Govern vaya a exigir el catalán a los profesionales sanitarios del Ib-Salut, por lo que le animó a "retirar" dicha exigencia. En declaraciones recogidas por Europa Press tras un desayuno informativo del Fórum Europa, la ministra sostuvo que los que "pierden" con esta medida son los pacientes y los profesionales del Sistema Nacional de Salud. Además, Montserrat consideró que obligar a los profesionales sanitarios a saber una lengua cooficial cuando se sabe la otra es "perder talento".

"Estamos en un gran país que es España donde en comunidades autónomas hay cooficialidad de idiomas y todos nuestros profesionales pueden utilizar cualquier lengua cooficial. Por tanto, y como nuestra Constitución nos garantiza la cooficialidad en las comunidades, animo al Govern a que retire esa exigencia obligatoria a los profesionales sanitarios porque realmente me parece dantesco", zanjó la ministra.

Con estas palabras se refería al acuerdo alcanzado entre PSIB y Més, socios de Govern, sobre el decreto de catalán para la sanidad pública balear, por el que no será necesario demostrar el conocimiento del idioma para presentarse a las oposiciones con el fin de obtener una plaza en el Ib-Salut. Sin embargo, los que las aprueben dispondrán de dos años para demostrar que cuentan con el nivel de catalán requerido en cada caso (B1 para médicos y enfermeras). En el caso de que, transcurrido ese tiempo, no acrediten el conocimiento de la lengua no podrán optar a la movilidad en las islas ni acceder a la carrera profesional, el plus salarial que reconoce el esfuerzo de los profesionales sanitarios para formarse.

"Demagogia"

Las declaraciones de Dolors Montserrat fueron recibidas ayer por los partidos del Pacto con una mezcla de sorpresa y rechazo. "La ministra no se entera de lo que es la realidad de Balears ni de lo que contemplará el decreto", coincidieron la portavoz parlamentaria adjunta del PSIB (Bel Oliver), el portavoz parlamentario de Podemos, Alberto Jarabo, y el secretario de comunicación de Més, Lluís Apesteguia, que acusaron a Montserrat de hacer "demagogia" con este asunto.

Oliver incidió en que el futuro decreto supondrá "compatibilizar el derecho a una sanidad de calidad con el conocimiento de la lengua propia de las islas" ya que "ninguna plaza vacante quedará sin cubrir por no conocer el catalán". Añadió que las oposiciones "supondrán dar estabilidad a nuestro sistema sanitario", por lo que insistió en que las declaraciones de la ministra "demuestran que no sabe de lo que está hablando" y forman parte de la postura de "seguir haciendo demagogia".

En el mismo sentido se expresó Apesteguia. "A mí lo que me parece dantesco son los recortes en Sanidad que impuso ella porque eso sí que pone en peligro la salud de los ciudadanos, mientras que el decreto del catalán no lo hace". Para el dirigente de Més, "el que una ministra cuestione lo que decide un Govern en el ejercicio de sus competencias, aplicando el Estatut d'Autonomia, es una falta de respecto a las instituciones y a los ciudadanos". David Abril, coportavoz de Més, recordó que fue el Govern del popular José Ramón Bauzá "el que despidió a 1.351 profesionales de la salud en la pasada legislatura", mientras que "el Govern del Pacto ha vuelto a contratar personal" y su objetivo con el decreto del catalán es "garantizar que la ciudadanía pueda ser atendida en su lengua" en la sanidad pública balear.

Jarabo afirmó que la ministra "demuestra que representa a esa España, cada vez más del pasado, monocolor, monolingüe y uniformadora, cuando la realidad es que es un Estado plurinacional con cuatro idiomas". Añadió que "los gobiernos de comunidades con dos lenguas oficiales tienen el deber de igualarlas y eso es respetar la Constitución".