La portavoz del Govern, Pilar Costa, se mostró ayer partidaria de revisar los casos de funcionarios que se reincorporan a su puesto de trabajo y no tienen el B2 de catalán "para que no se produzca ninguna injusticia".

Así se expresó Costa en respuesta a una pregunta de los medios de comunicación durante la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, relativa al caso de una funcionaria del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) -entidad que no depende del Govern, sino del Consell de Mallorca-.

Costa indicó que cuando los trabajadores en excedencia vuelven a su puesto de trabajo debe ser con las condiciones que establece la normativa en el momento del retorno, pero "si en casos concretos" se producen "disfunciones", como por ejemplo por el nivel de catalán exigido, afirmó que "se tiene que revisar para que no se produzca ninguna injusticia para aquel trabajador que se fue con unas condiciones y ahora vuelve y hay otras".

Un requisito polémico

En el caso de la trabajadora del IMAS, la mujer denuncia que no puede volver a su plaza porque no tiene el nivel B2 de catalán, que no se exigía cuando comenzó la excedencia.

La trabajadora tiene plaza fija en la residencia para personas mayores de la Bonanova, tal como informó el diario 'Ara Balears'.

El requisito del catalán para trabajar en la administración ha tenido bastante contestación en el ámbito de la sanidad pública, donde los sindicatos se oponen a que se considere un requisito y no un mérito.