El Tribunal Superior de Justicia rechaza la posibilidad de abrir diligencias contra el fiscal superior de Balears, Bartomeu Barceló, porque entiende que no tiene competencias para ello. Por este motivo remite testimonio de la querella que ha presentado uno de los abogados de Cursach contra Barceló al Tribunal Supremo, al entender que le corresponde por competencia.

Esta querella la presentó el abogado Vicente Campaner, próximo al empresario Bartolomé Cursach, que acusó al fiscal de un delito continuado de prevaricación, omisión del deber de persecución de delitos y encubrimiento. El letrado acusó a Barceló de no haber tomado ninguna decisión después de las supuestas declaraciones de la madame, que parece ser que aseguró que la fiscalía tendría conocimiento de la manipulación de una escopeta hallada en el domicilio de Cursach, de la que no tenía permiso. De hecho, por la posesión de esta arma, de procedencia ilegal, el empresario tendrá que sentarse en breve en el banquillo. Se le solicita 18 meses de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas.

El letrado pidió la inhabilitación del fiscal superior, "por haber faltado a la lealtad de su cargo". El Tribunal Superior designó a un ponente para estudiar la querella. El juez ha estudiado el caso y ha concluido que no le corresponde al Tribunal Superior de Balears tramitar dicha querella. En la resolución adoptada se explica que la categoría de fiscal superior se podría equiparar a la de presidente de tribunal superior. Por tanto, en el caso de una denuncia por su actuación profesional, la competencia para investigarla corresponde al Tribunal Superior. Por ello, se remite la querella a dicho tribunal.

Dos querellas más

Por otra parte, el mismo abogado ha presentado otras dos nuevas querellas contra el juez Penalva y el fiscal Subirán por varios delitos. Uno de ellos es por encubrimiento, ya que acusa a los dos funcionarios de desatender las quejas de las defensas acerca de la testigo protegida número 31, ya que afirma que esta mujer manifestaba una versión inverosímil. El letrado, al que el TSJB ha ordenado investigar disciplinariamente, asegura que era "imposible" que no se atendiera las contradicciones de la madame. El abogado Vicente Campaner acusa al juez y al fiscal de actuar "cegados" en su deseo de que se condene a los investigados en el caso Cursach.