El ex fiscal Anticorrupción y ahora abogado Pedro Horrach ha considerado una "falta de respeto" que el juez Manuel Penalva le acusara de obstrucción a la justicia por interponer querellas contra determinadas personas que declararon en contra del que fuera su cliente.

"No puedo admitir de ninguna manera que Penalva en el auto pusiera de manifiesto que el hecho de interponer una querella criminal constituya una delito de obstrucción a la justicia. Es impresentable y más que lo haga un juez", ha criticado en una entrevista en IB3 Radio.

Asimismo, sobre que se insinuara que era el abogado defensor del empresario Bartolomé Cursach, Horrach ha defendido que no le conoce ni le ha defendido nunca "pero tampoco tendría ningún problema en defenderlo". El ex fiscal finalmente se apartó del caso Cursach tras la recomendación del Colegio de Abogados, aunque ha sostenido que llevó a cabo la defensa que consideraba "más adecuada".

"Ellos consideraban que en esos momentos era mejor que me apartara para determinar si había incompatibilidad y así lo hice", ha detallado Pedro Horrach.

El ex fiscal Anticorrupción y ahora abogado defensor ha asegurado, sobre el caso Sa Nostra, que si bien no admiten que haya habido conducta delictiva alguna, si la hubiera "ya estaría prescrita". Horrach ha explicado que en cuanto a las sociedades participadas han pasado siete años desde que se produjeron los hechos y que el tiempo de prescripción es de cinco años.

Asimismo, ha indicado que existen "argumentos y muchas posibilidades de que se archive la causa", o al menos en la que él interviene. "Todos los problemas derivan de una situación de crisis que surgió en 2005-2007, que nadie preveía", ha añadido. Horrach ha expuesto que Sa Nostra "vio una gran oportunidad de hacer negocio a través de la construcción y promoción inmobiliaria y empezó a constituir sociedades participadas".

Con esta acción, ha continuado, "ganó mucho dinero, hasta que en un momento en que llegó la burbuja inmobiliaria y esta sociedades entraron en concurso, no se pudieron devolver las deudas y se entró en crisis".

El abogado defensor del promotor Martín Gual ha negado que Sa Nostra estuviera funcionando sin control ya que había un comité de riesgos, uno de inversiones y analistas. "Los controles estaban y las decisiones se tomaban en un consejo de administración donde estaban representados todos los departamentos que intervenían", ha dicho.

El abogado ha defendido que, una vez objetivado los hechos y tras documentarse, ha constatados que no hubo desvío de dinero "porque no salieron de las cuentas de Sa Nostra".