El Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), a través de la Sala de lo Penal, pone punto y final a la querella que dos abogados presentaron contra el juez y el fiscal que investigan el caso Cursach. La Sala rechaza el recurso de súplica contra un anterior auto, en el que ya se rechazó la querella, por la que se pedía incluso la detención de Penalva y de Subirán, al no apreciar delito alguno en la actuación del instructor y del fiscal.

Si el primer auto fue contundente contra la actuación de los dos abogados, mucho más duro ha sido incluso la última resolución del tribunal. Se sospecha que los dos letrados han actuado por mala fe procesal y que han podido alterar el contenido de unas conversaciones, al describirlas entrecomillas en un sentido muy distinto al real. Pero, además, también se sospecha que las grabaciones aportadas en la querella, que recogen una conversación que mantuvo el juez Penalva con la ´madame´, habrían sido manipuladas. Por ello, se oficia a la Guardia Civil para que analice las grabaciones y confirme o desmienta estas sospechas.

La querella, en nombre de la hermana de un imputado, la presentaron los letrados José Ignacio Herrero y Vicente Campaner. Ambos dedicaron graves acusaciones contra el juez y el fiscal, asegurando que, por una parte, intimidaban a los testigos y, por otra, manipularon declaraciones. La Sala ha analizado todas las pruebas que se aportan en la querella, como por ejemplo las grabaciones de algunas declaraciones, y se llega a la conclusión de que la manipulación denunciada no existe. Muestra de ello, es que el TSJB pidió a los letrados que detallaran en qué minuto de la grabación se produce dicha manipulación del testigo. Sin embargo, los abogados no respondieron a esta petición.

El TSJB ordena que se inicie un proceso disciplinario contra los dos abogados y se demuestre si han actuado con mala fe procesal. A los jueces no les ha gustado que los abogados cuestionaran la actuación de la Sala y señalaran que los jueces actuaban con mala fe procesal. La resolución denuncia que los letrados han advertido que si no se aceptaba a trámite dicha denuncia contra juez y fiscal, irían utilizando otros elementos para ir interponiendo "sucesivas querellas". Al mismo tiempo, también se afirma que los letrados han ido ocultando información y datos. Otra de las decisiones que adopta el tribunal, además de rechazar dicha querella, es que se depuren responsabilidades por la ausencia del secretario judicial en las declaraciones de algunos testigos. Los abogados afirmaron que se había pedido su presencia, pero se denegó por el juez, afirmación que ahora reconocen que no respondía a la verdad.