El hijo de Bartolomé Cursach, que se llama igual que su padre, ha sido imputado por la Policía por un presunto delito de suplantación, ya que se sospecha que se hizo pasar por otra persona, que es un testigo protegido del caso, para realizar un comentario en un periódico digital utilizando su nombre como firma. En este comentario aseguraba, haciéndose pasar por dicho testigo, que también el juez Penalva y el fiscal Subirán le habían coaccionado para declarar. Una intervención en internet que se produjo coincidiendo con la campaña de desprestigio que han venido sufriendo tanto el juez Penalva como el fiscal Subirán, contra los que se han organizado hasta dos manifestaciones callejeras para acusarles de coaccionar a testigos.

Precisamente, el testigo protegido fue quien descubrió que una persona estaba utilizando su nombre en un periódico digital para atacar al juez. Además de intervenir también en este medio digital, para decir que alguien estaba escribiendo utilizando su nombre, presentó la correspondiente denuncia judicial.

La Policía ha realizado una completa investigación y ha comprobado que la dirección de internet desde la que se realizó dicho comentario se sitúa en el domicilio habitual de residencia del hijo de Bartolomé Cursach. Los investigados sólo pueden señalar la dirección informática, pero no pueden determinar qué persona tecleó el ordenador para realizar este comentario en internet.

El hijo de Cursach fue citado en la mañana de ayer para que acudiera a comisaría a prestar declaración. Tenía que acudir acompañado de un abogado. El joven, que trabaja en el grupo empresarial que creó su padre, acudió a la hora prevista a las dependencias policiales acompañado de su abogado de confianza. El joven conocía perfectamente la acusación que pesaba sobre él. La Policía quería aclarar si había sido él quien había realizado este comentario informático en nombre de un testigo o, en cambio, había sido otra persona. En cualquier caso esta intervención informática se había realizado desde la línea de internet que está instalada en el domicilio del familiar del empresario encarcelado.

El joven se negó a contestar a las preguntas que le pretendían formular los investigadores, acogiéndose a su derecho a guardar silencio. El hijo del empresario únicamente quiso responder a las preguntas de su abogado y lo hizo para negar ser el autor de dicho comentario informático. También negó que tuviera conocimiento de la persona que había realizado esta intervención digital utilizando otro nombre.

Atestado policial

Ante su negativa a declarar ante los policías, la presencia del hijo del empresario en comisaría fue relativamente breve. Esta declaración, que únicamente recoge las respuestas a las preguntas del abogado, será unida al atestado policial que se ha venido elaborando en las últimas semanas como consecuencia de la denuncia que presentó el testigo al que habían suplantado su identidad. Este atestado será remitido en breve ante el juzgado de instrucción número 12. El juez será quien cite a declarar al hijo del empresario para que aclare si fue él, u otra persona, quien se hizo pasar por uno de los testigos para atacar a los investigadores.