Casi 600 kilos de basura al año. Esos son los residuos que genera de promedio cada mallorquín durante un año (con la notable ayuda de los turistas, claro, y sin incluir en esa cifra los desechos que se tiran de forma separada para su reciclaje).

De esos 595 kilos por habitante que cada año acaban en el contenedor de rebuig, el 77% (459 kilos) son de plástico. Cada año, los mallorquines tiran como rebuig casi 400 toneladas de plástico. Un dato para la reflexión en un momento en que no paran de sucederse los estudios y campañas que alertan sobre la contaminación del Mediterráneo por plásticos.campañas que alertan sobre la contaminación del Mediterráneo por plásticos

Incluyendo en el cálculo todo lo que se tira, se separe o no para su reciclaje, la tasa de residuos se va a los 701 kilos por habitante. ¿Podemos calcular cuál es la aportación del turismo a esa tasa? El Consell no dispone de ese dato, pero sí sabe que los municipios costeros multiplican por cuatro sus residuos en verano. Solo en agosto de 2017 se recogieron 68.323 toneladas de residuos, incluyendo tanto el rebuig como los residuos que son desechados para su recogida selectiva.

Estos son los datos que maneja el órgano insular. En un año, en la isla se generan 609.475 toneladas de residuos, de las cuales apenas el 16% se separan para su reciclaje. El resto, 517.397 toneladas, van al contenedor verde sin posibilidad de recuperación.

Del vidrio, la mitad se tira para reciclar mientras la otra mitad va a rebuig. En el caso de los envases ligeros (latas, papel film, papel de plata...) apenas un tercio se tira en el contenedor amarillo para su reciclaje.

Mucha diferencia entre pueblos

Estas proporciones son un promedio de toda la isla, aunque pueden variar mucho de un municipio a otro debido a los diferentes sistemas de recogida implantados. En los pueblos que aplican la recogida puerta a puerta como Esporles; Maria de la Salut o Valldemossa, por citar solo tres casos, se alcanzan porcentajes más elevados de reciclaje. En Valldemossa por ejemplo se llega al 70%, el mismo porcentaje que el ayuntamiento de Palma asegura haber conseguido en los barrios del centro en los que ha implantado el nuevo sistema de recogida móvil.

Mirando las cifras de todas las islas en su conjunto, la situación no varía. Según el Instituto Nacional de Estadística, Balears es la comunidad que más residuos genera por habitante: 800,6 kilos de basura al año. Los datos son de 2015 y suponen un crecimiento del 20,5% respecto al año anterior (el rebuig creció un 25% y la recogida selectiva un 5,6%).

Queda mucho margen de mejora y el plástico se perfila como el principal caballo de batalla para aumentar el índice de reciclaje de residuos plásticos, pero, sobre todo, buscando que ni se lleguen ni a generar.

La masa crítica que ve el grave problema medioambiental que supone el plástico mal desechado crece cada día que pasa. El mar es el mayor perjudicado y el escenario más evidente de este problema. Este verano en Mallorca se han sucedido las campañas alertando sobre la contaminación del Mediterráno por plásticos.

Estudios y campañas

El Centro Oceanográfico de Balears del Instituto Español de Oceanografía (IEO) realizó una campaña de recogida de muestras para evaluar el nivel de limpieza de las aguas de Mallorca y una de sus primeras constataciones es alarmante: "Ninguna de las zonas costeras muestreadas está libre de la presencia de los macro y microplásticos".

El proyecto europeo BlueIslands también está estudiando hasta qué punto los litorales de las islas mediterráneas (incluyendo Mallorca) se llenan de plástico durante la temporada estival mientras que la ONG Mallorca Blue ha hecho de la lucha contra la contaminación por plásticos en el mar una de sus grandes cruzadas, al ser una de las principales amenazas para sus habitantes.

Greenpeace visitó Mallorca en junio con su campaña Menos plástico, más Mediterráneo y recordó que entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas de plástico llegan a los océanos cada año. La entidad Oceancare también llevó a cabo acciones en la isla para alertar sobre esta plaga.