La Asociación de Compañías Españolas de Transporte Aéreo (Aceta), de la que forman parte Air Europa, Iberia y Air Nostrum, entre otras, comunicó ayer que no reclama al ministerio de Fomento la supresión del descuento de residentes, sino mejoras en su gestión a efectos, por ejemplo, de agilizar el cobro de las cantidades adelantadas por las aerolíneas en concepto de subvención.

Aceta difundió una nota de prensa para salir así al paso de las informaciones publicadas en los últimos días sobre una reivindicación reciente efectuada ante el ministerio de Fomento; unas noticias que, aseguró la entidad, malinterpretaron su posición sobre los billetes subvencionados.

"Las compañías aéreas consideran que el sistema de ayudas a través de bonificaciones en los billetes de residentes beneficia no sólo a pasajeros, a quienes facilita su movilidad, sino también al propio sector, ya que favorece el tráfico aéreo, lo que es, sin duda positivo", señalaron desde la mencionada asociación.

No obstante, Aceta reconoció que sí ha solicitado al ministerio de Fomento que cambie el actual sistema de subvenciones, pero con el único objetivo, sostuvo, "de mejorarlo, dotarlo de más agilidad y evitar posibles agravios económicos a las compañías aéreas derivados de la complejidad de su aplicación".

Mecanismo de liquidación

En este sentido, la Asociación de Compañías Españolas de Transporte Aéreo argumentó que debería actualizarse la normativa que regula el proceso de liquidación de las subvenciones que adelantan las aerolíneas en las comunidades de Balears y Canarias, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Un procedimiento que se rige por un real decreto de 2007 y que, puntualizó Aceta, "no afecta a los viajeros, sino a la relación entre la administración y las compañías aéreas".

Esta asociación está formada por Air Nostrum, Air Europa -las dos compañías que operan vuelos interislas en Balears-, Binter Canarias, Canair, Evelop, Iberia, Iberia Express, Naysa y Vueling. Son aerolíneas que realizan operaciones de tráfico regular, carga, aviación ejecutiva, regional y chárter.

En el ámbito autonómico, el director general de Puertos y Aeropuertos del Govern, Xavier Ramis, defendió ayer la vigencia del actual modelo de descuento para residentes en el transporte aéreo y marítimo, como medio de favorecer la conectividad de los ciudadanos de las islas.

La bonificación es del 50% en el caso de las conexiones con otros destinos nacionales y del 75% en el caso de los trayectos interinsulares. Con todo, Ramis compartió la reivindicación de las aerolíneas en el sentido de que el Ejecutivo central debería implementar una serie de mejoras para que las compañías no tarden tanto en cobrar el dinero que avanzan en concepto de esta bonificación.

Seis meses

Las aerolíneas se quejan de que el sistema de liquidación es excesivamente lento, de forma que tardan hasta seis meses en cobrar del Estado el dinero adelantado para los billetes bonificados.

"Hay que recordar que (en los trayectos interinsulares) con el aumento de la bonificación la compañía sólo recibe el 25%, mientras que el otro 75% tiene que estar meses para cobrarlo. Ésta es una preocupación que tienen ellos. Esta situación hace que necesiten recursos bancarios y esto genera intereses", argumentó el director general de Puertos y Aeropuertos, quien recordó que, en el caso del transporte marítimo, las navieras cobran a tres meses vista.

Aumento de los controles

Respecto a las quejas expresadas en ocasiones por las aerolíneas sobre la existencia de picaresca por parte de algunos pasajeros que viven en la península, pero siguen empadronados en Balears para aprovechar la bonificación, Ramis sostuvo que en los últimos años se ha mejorado "mucho" el control del fraude.

En cualquier caso, defendió la vigencia del actual modelo de bonificaciones y resaltó que este sistema contribuye a la potenciación de la conectividad de los ciudadanos de las islas.

Según resaltó, los billetes bonificados facilitan el mantenimiento de ciertas líneas aéreas y marítimas al permitir un alto nivel de pasajeros en beneficio de las propias compañías.