Tolo Sbert, el principal ejecutivo del grupo Cursach, abandonó ayer por la noche la prisión de Palma, depués de abonar en metálico una fianza de medio millón de euros que impuso el juez Penalva y más tarde ratificada por la Audiencia.

Segun fuentes jurídicas, el ejecutivo, que estaba en prisión desde el mes de marzo, presentó inicialmente una finca del Grupo Cursach como aval de la fianza, pero debido a que estaba pendiente de ser valorada por un perito, pagó la fianza en metálico. Sbert se había negado inicialmente a pagar la fianza, alegando que se encontraba más seguro en prisión y señalando que no tenía el dinero suficiente para pagarla. Su abogado acudió a la Audiencia para rebajar la fianza, pero los jueces entendían que tiene medios económicos más que suficientes para pagarla.

Con la libertad de Sbert, cuyo mandamiento se firmó el lunes por la tarde, únicamente queda en prisión Tolo Cursach, el principal acusado de la trama corrupta, a quien el juez Penalva ha denegado en dos ocasiones la puesta en libertad.