El intrusismo y la falta de conductores son dos de las grandes preocupaciones que planearon ayer durante la asamblea de la Asociación empresarial del servicio de transporte discrecional de Balears. Hay pocos profesionales del volante, tanto para transportar mercancías como personas, y este hecho se agrava en temporada alta.

"Hace un tiempo nos reunimos con Iago Negueruela [conseller de Trabajo, Comercio e Industria del Govern] y le pedimos que se incentivara la formación de nuevos conductores. Antes solo era necesario sacarse el carnet C o D. Ahora le tienes que añadir un CAP, un certificado de aptitud profesional que obtienes después de hacer un curso de 140 horas y un examen. Todo el proceso supone una inversión de entre cuatro y cinco mil euros, lo que disuade a mucha gente", explicó Salvador Servera, gerente de la Federación empresarial balear de Transportes.

"Expusimos al Govern la necesidad de que se dirigiera a desempleados para incentivar su formación. Antes encontrabas a personas con carnet porque se lo habían sacado en el Ejército o en otros ámbitos. Ahora es mucho más difícil encontrar profesionales", expuso Servera.

La asamblea trató el problema del intrusismo en el sector del transporte discrecional, más acuciante en Eivissa. "El lunes tendremos una reunión con el Govern para que nos explique los resultados de un plan de choque contra el intrusismo que se desarrolló la pasada temporada alta. A día de hoy no tenemos datos de inspecciones, sanciones o vehículos inmovilizados", indicó Servera.

En todo caso, subrayó que, según los datos que manejan en la asociación, el intrusismo sigue estando muy presente en el sector del transporte discrecional.

Las "abusivas" tarifas que cobran los ayuntamientos por aparcar y la renovación de la flota de autocares fueron otros dos de los asuntos que se trataron durante la asamblea.