El vacío ante la dimisión de Biel Barceló ha abierto una brecha en Més. Cuando se daba por hecho que la consellera de Servicios Sociales, Fina Santiago, era la mejor colocada para asumir la vicepresidencia, el núcleo duro del PSM, que ha asumido la negociación para el relevo de Barceló, ha decidido vetarla para el cargo. La formación nacionalista propone que sea su líder, la diputada Bel Busquets, quien asuma la vicepresidencia y la conselleria de Turismo o, como segunda opción, que la asuma la también diputada del PSM, Joana Aina Campomar.

La reunión de ayer, en que la dimisión de Barceló se dio por hecha desde un inicio, sirvió para analizar la situación tras su salida y ahí resurgieron las tensiones entre PSM e IniciativaVerds. El temor de los nacionalistas es que si Santiago se convierte en el principal cargo del partido, IniciativaVerds tome el control de la formación. Por ahora, todos los cargos de Iniciativa han sido apartados de las negociaciones para la reorganización del Govern. El equipo negociador lo forman Bel Busquets, Joana Aina Campomar, Lluís Apesteguia y Joan Font, todos del PSM.

Tras la reunión en la sede de IniciativaVerds en que se acordó la salida de Barceló, los miembros de la Ejecutiva que forman parte del PSM se reunieron a solas. El veto del PSM a que Fina Santiago acceda a la vicepresidencia tiene el apoyo del llamado clan de Esporles, del que forman parte el presidente del Consell, Miquel Ensenyat o el conseller Vicenç Vidal. El alcalde de Palma, Antoni Noguera, no se ha sumado al veto a Santiago, si bien respalda que Busquets sea propuesta para vicepresidenta, manteniendo una posición intermedia.

Durante el día de hoy, el nombre de Bel Busquets como vicepresidenta será propuesto a la presidenta, Francina Armengol. Con independencia de cuál sea la respuesta de la presidenta, Més tiene prevista una nueva reunión esta tarde para acabar de definir la reorganización del Govern.