El sindicato sanitario CSIF ha exigido al director gerente del hospital de Son Llàtzer, Francesc Marí, una rectificación por las declaraciones que efectuó a este diario y en las que atribuyó a "fallos administrativos" los grandes retrasos de hasta un año que soportan los pacientes del centro para ser visitados por segunda vez por los especialistas médicos para informarles acerca de una prueba diagnóstica o sobre la evolución de su enfermedad.

Así, el CSIF exige a Marí que "pida disculpas a todos los trabajadores del servicio de admisión de dicho centro hospitalario" por unas declaraciones con las que, en su opinión, "criminaliza al personal administrativo por los grandes retrasos en las segundas visitas" atribuyéndolos a "fallos administrativos" en las citaciones, según recoge el sindicato en un comunicado.

"Sin entrar a valorar la responsabilidad que tiene el máximo responsable elegido por la Administración sobre la aciaga gestión de la lista de espera, ni sobre los pactos en los que se entabla (sic) con los jefes de servicio del hospital, corresponsables por más que les pese de la gestión. CSIF entiende que no se puede consentir el trato vejatorio que supone tales manifestaciones y que ponen en duda la profesionalidad de los trabajadores públicos", continúa el comunicado sindical.

"A los pies de los caballos"

Por ello, el CSIF anima a los "compañeros de admisión y en general de todo el hospital" a que secunden "esta enérgica protesta con la estampa de su firma" y advierte de que se mantendrá alerta de las reacciones que puedan producirse entre la ciudadanía por estas declaraciones al entender que "pueden suponer un riesgo para la integridad física de los profesionales" que han sido puestos "a los pies de los caballos" con tales acusaciones.

Denuncia por último este sindicato que la gerencia del hospital "no haya atendido las numerosas peticiones de que se incremente el número de efectivos en la unidad de admisión para aliviar tanto el aumento de trabajo como la no sustitución de ciertas bajas. Muy especialmente ante la falta de recursos tanto en citación como en el servicio de call center que está repercutiendo en la atención a la ciudadanía". El sindicato de funcionarios concluye lamentando otros descubiertos y, por ejemplo, que admisión de urgencias lleve más de 6 meses sin coordinador.