El Col·legi Oficial de Psicologia de les Illes Balears (COPIB) se une a las organizaciones que conmemoran mañana martes, 28 de noviembre, el Día Internacional de las Personas sin Hogar para reivindicar un pacto de las Administraciones para desarrollar políticas públicas que protejan a este colectivo y que apuesten por la garantía de acceso a derechos humanos fundamentales, como la vivienda y la salud. En este sentido, la institución colegial destaca la importancia de facilitar la atención psicológica profesional para prestar una atención adecuada a los distintos perfiles que conforman este grupo de población y favorecer su reinserción.

Los profesionales de la psicología de las Islas aseguran que una persona sin hogar representa el nivel máximo de exclusión social y marginación de una sociedad moderna, pero sobre todo representa un fracaso social colectivo. Por ese motivo, el COPIB llama a la unidad y se pone a disposición de las autoridades competentes para trabajar de forma conjunta en la elaboración de propuestas que permitan garantizar una atención adecuada y adaptada a las necesidades de cada perfil.

Vicente Alcántara, vocal de Intervención Social del COPIB, recuerda que "cada uno de estos individuos presenta una problemática muy diversa, no sólo porque existen grupos de edad diferenciados, nacionalidades y sexos diferentes, sino por el estado anímico y los motivos que han llevado a estas personas a estar en la calle: casos de adicción, salud mental o incluso violencia de género", explica el experto. Todo ello, prosigue, "genera también una distinción considerable en el grado de conflictividad de cada caso a nivel interpersonal, la cronificación de la gravedad del caso y la motivación que pueda presentar el usuario para el cambio", señala. El COPIB considera que el trabajo interdisciplinar y coordinado facilitaría una ordenación diferenciada del colectivo de personas sin hogar que permitiría ofrecer respuestas específicas para cada uno de ellos.

La reinserción de estas personas constituye el reto más importante y conocer el motivo que les ha llevado a la calle es otro factor que cabe considerar para que pueda realizarse con éxito: pérdida de trabajo, desahuciado, separación de pareja, sufrió violencia él/ella o sus hijos, estuvo privado de libertad, entre otras variables. En ese contexto, Vicente Alcántara explica que "la colaboración del psicólogo junto a un equipo interdisciplinar de profesionales de la salud y de los servicios sociales facilitaría procesos como la dirección, gestión, planificación y evaluación de programas de actuación".

También se apuesta por potenciar una labor de acompañamiento y motivación del individuo en las diferentes etapas del cambio hasta que consigue ser autosuficiente. El vocal de Intervención Social del COPIB recuerda que "estas personas, bien dirigidas, puedan volver a recuperar la confianza y la autoestima si se ven acompañadas por redes de apoyo social durante el proceso dentro de la propia administración", concluye.