El exlíder de Podemos y actual portavoz parlamentario del partido, Alberto Jarabo, se reunirá el miércoles con el vicepresidente y conseller de Turismo, Biel Barceló, para tratar sobre las dimisiones en su departamento de la ya exdirectora general de Turismo, Pilar Carbonell, tras su imputación en el caso Cursach, precedidas de las que provocó el caso Contratos. No obstante Jarabo, que la pasada semana consideró que Barceló debería dimitir, no planteará en este encuentro esta petición. El dirigente de Podemos ha afirmado esta mañana, además, que el partido no condiciona el respaldo al Govern del Pacto a la continuidad de Barceló, cuya dimisión "no es un fin en sí mismo".

"No tenemos la intención de distanciarnos del Govern", ha insistido Jarabo quien ha considerado que en estos casos se han asumido responsabilidades políticas ya que los imputados están fuera del Ejecutivo balear y que cuando planteó la pasada semana la conveniencia de que Barceló dimitiera lo hizo en el contexto de "una valoración de los hechos".

Barceló volverá a ser noticia mañana en el pleno del Parlament cuando la portavoz popular, Marga Prohens, pregunte a la presidenta Francina Armengolen el vicepresidente y conseller de Turismo. Prohens ha afirmado esta mañana que, "con independencia de que la mitad de los cargos de Barceló hayan tenido que dimitir o estén imputados", algo que se juzgará en los tribunales, "a los ciudadanos les preocupa la gestión" y esta gestión, a su juicio, es un "desastre".

"Si mañana Armengol no le retira la confianza, será cómplice de esa gestión desastrosa", ha dicho Prohens. No obstante, la situación de Barceló ante los casos que han afectado a su departamento se colará inevitablemente en la exigencia de explicaciones de la portavoz popular a Armengol. El pasado martes, Barceló se libró in extremis de ser reprobado a petición del PP, al producirse un empate. "Para nosotros Barceló está reprobado porque cuando después de tres votacioes se rechaza por un empate técnico, en la práctica está reprobado", ha dicho Prohens quien ha considerado que el que Armengol le mantenga como vicepresidente y conseller "demuestra la debilidad" de la presidenta, quien "no tiene autoridad suficiente para destituirle".

Desde el Pacto, tanto el portavoz parlamentario socialista, Andreu Alcover, como el coportavoz de Més per Mallorca, David Abril, han considerado que con las dimisiones en la conselleria de Turismo ya se han asumido las responsabilidades políticas que correspondían.

Abril, en concreto, ha lanzado una férrea defensa de la gestión de Barceló y ha asegurado que los ataques que recibe se deben a su gestión turística, que "molesta a poderes económicos". En este sentido ha afirmado que "no hay un conseller en Europa y en el mundo que diga que no tienen que venir más turistas en verano", como ejemplo de una política turística que es "justo la contraria a la de hacer seguidismo y actuar como brazo armado de la Federación Hotelera". Por ello, ha defendido la continuidad de Barceló para seguir con esta política que ha dado respuesta "como nunca" a los grandes problemas del turismo en Balears.