La consellera de Hacienda y Administraciones Pública, Catalina Cladera, avanzó que en los dos últimos trimestres del año se producirá una reducción de la deuda en términos absolutos, que dejará la deuda a final de 2017 en la línea de los 8.800 millones de euros.

Así lo aseguró ayer la consellera, quien ha destacado que se quedará "muy por debajo del 30,1% del límite legal marcado por el Consejo de Política Fiscal y Financiera en cumplimiento con el Plan de Estabilidad".

"Hablamos de una deuda pública en Balears del 29,6% del PIB, al cierre de este año", manifestó Cladera en la Comisión de Hacienda y Administraciones Públicas. Esta tendencia de reducción de la deuda, aseguró, "será más acentuada en 2018, ya que en términos relativos podremos cerrar el año por debajo del 29%".

Además, incidió la consellera, la deuda podrá bajar en términos absolutos, a final de 2019, por primera vez en Balears en los últimos 10 años.

Sobre la deuda pública, a la que se destina una partida de 1.020 millones de euros, Cladera señaló que se trata de "una cuestión de primera magnitud" y explicó que "la progresiva reducción del déficit público, que en 2017 quedará muy probablemente cerca del 0%, incide a la estabilización de la deuda".

"La gestión del Govern permite dibujar una clara línea descendiente de la deuda, pero con un ritmo lento", manifestó la consellera, quien reivindicó la compensación por la infrafinanciación histórica de Balears.

Por otra parte, Cladera, lamentó también que la aplicación "demasiado estricta" de la regla de gasto impide que el aumento de los presupuestos de la CAIB de 2018 sea mayor, puesto que "el entorno económico de Balears lo permitiría".

La consellera señaló que la regla de gasto provocará que en el año 2018 no se puedan aplicar a políticas activas un contingente de ingresos de 200 millones de euros. "Este incremento de presupuesto del 7,3% es inferior a lo que nos toca en nuestra comunidad, señaló Catalina Cladera.