El 43% de las mujeres que interrumpió su embarazo el año pasado en las islas no habían nacido en España; más de seis de cada diez trabajaban y eran económicamente independientes; la mitad de ellas convivían en pareja y tenían algún hijo antes de abortar; una de cada tres (33%) se habían sometido anteriormente a un aborto y el 45% no usaba métodos anticonceptivos. Este es su perfil en las islas.