Cort ha autorizado el pago de la ayuda de 355.000 euros a la empresa adjudicataria del deficitario matadero de Palma, garantizando así que siga abierto de cara a la próxima campaña de Navidad. La subvención, correspondiente al ejercicio de 2017, la paga formalmente el Ayuntamiento de Palma, pero un 55% del importe sale del presupuesto de la conselleria de Medio Ambiente.

La adjudicataria Escorxador i Serveis Càrnics Palma SL, propiedad del empresario cárnico Joan Pocoví, había amagado con cerrar en caso de que no recibiera la ayuda. La partida de 355.000, la cantidad máxima prevista para este año, cubre el déficit de explotación de 2016.

Cort suspendió el pago de la ayuda el pasado julio, cuando este diario desveló la investigación por parte de Hacienda de una posible doble contabilidad en el matadero. El Ayuntamiento abrió entonces una investigación interna a través de la Intervención municipal que no ha detectado irregularidades en la contabilidad oficial. En todo caso, las pesquisas de la Agencia Tributaria, que sospecha que la adjudicataria ocultó parte de su facturación real para minimizar los beneficios obtenidos, siguen su curso.

Cort ha decidido además abrir el grifo por las presiones recibidas de parte del sector ganadero, muy preocupado por el posible cese de la actividad de la instalación de referencia en la isla. Y cerca de una campaña navideña que multiplica la carga de trabajo.

Los otros tres mataderos de Mallorca -Inca, Manacor y Felanitx- se hubieran visto desbordados en caso de tener que asumir el volumen de trabajo del de la capital.

Ahora la pelota está en el tejado de la conselleria de Medio Ambiente, que debe transferir a Cort el 55% de la subvención. El departamento que dirige Vicenç Vidal recela de Pocoví, empresario cercano al PP que sufragó las comidas a base de langosta en Cabrera del exconseller y líder del PP, Biel Company, y del también exconseller Rafel Bosch.

El nombre de Pocoví volvió a asociarse con Cabrera este verano, cuando este diario desveló que un trabajador público le trasladó en una embarcación de la conselleria desde su barco hasta la costa.

Escorxador i Serveis Càrnics Palma SL tiene la concesión del matadero desde 2013, cuando la quiebra de la empresa pública CarnIlla que lo gestionaba, puso en peligro la continuidad de la actividad de las instalaciones. El entonces conseller de Agricultura y actual presidente del PP, Biel Company, intervino para que Cort, en aquel momento liderado por Mateu Isern, salvara el matadero sacando a concurso un pliego de condiciones que únicamente pudo cumplir Pocoví.