Tres años de prisión, más el pago de una cuantiosa multa, es la pena que tendrán que cumplir unos padres que se dedicaron a amenazar e insultar a funcionarios del Instituto Mallorquí d´Afers Socials (IMAS), porque habían decidido retirarles la custodia de sus tres hijos.

Los dos acusados estuvieron acampados frente al Instituto, en la calle General Riera de Palma, durante varias semanas. Allí instalaron una tienda de campaña, con mobiliario, y colocaron múltiples pancartas y letreros con mensajes reivindicativos, dedicados a los responsables de los expedientes de protección de los hijos de los dos acusados. Cuando estos funcionarios entraban o salían del recinto, recibían toda clase de insultos o amenazas, tales como "corruptos, maltratadores, sabemos dónde vives, sabemos la matrícula de tu coche, ladrones o roba niños".

También los padres les dirigían gestos amenazantes, como pasar el dedo pulgar por su cuello o apuntarles con la mano como si fuera una pistola. Los dos acusados permanecieron casi un año acampados frente al edificio, organizando además varias manifestaciones. Los funcionarios denunciaron que se sintieron atemorizados por estas amenazas.