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Economía

El ahorro balear crece a un ritmo de 4,6 millones de euros diarios

Los depósitos en entidades financieras de los isleños se han incrementado en un año en 1.693 millones de euros

El ahorro balear crece a un ritmo de 4,6 millones de euros diarios

Las familias y empresas de Balears están alcanzando cifras históricas de ahorro tras la dura experiencia de la crisis, y éste se está incrementando a un ritmo de 4,6 millones de euros diarios, al mismo tiempo que siguen rebajando el endeudamiento, según los datos que el Banco de España acaba de publicar.

El valor de los depósitos en las oficinas bancarias de las islas alcanzó al cierre del segundo trimestre del presente ejercicio los 23.699 millones de euros, lo que supone 1.693 millones más que en el mismo periodo de 2016 y la cifra más alta jamás registrada en esa época del año, y todo apunta a que en el tercer trimestre de 2017 se ha alcanzado un récord histórico absoluto.

Por su parte, la cantidad que los isleños deben a los bancos se ha situado en esas fechas en 31.451 millones de euros, lo que supone una rebaja de 829 millones de euros respecto al ejercicio anterior, caída en la que las Administraciones del archipiélago han tenido un especial protagonismo.

Un proceso necesario

Lo primero que destaca el catedrático de Economía Aplicada y director de la Fundación Impulsa, Antoni Riera, es que estamos ante un proceso positivo. Balears era la comunidad autónoma con el mayor nivel de apalancamiento, ya que por cada euro ahorrado llegó a deber 2,4, cuando ahora esta proporción es de 1,3. Además, quien estaba financiando esa deuda no era el ahorro local, sino externo, principalmente Alemania y China, lo que conllevaba una dependencia exterior excesivamente alta.

Lo que empresas y ciudadanos de Balears han hecho a medida que se ha ido recuperando la economía es ponerse a ahorrar, dentro de sus posibilidades, tras la dura experiencia que ha supuesto la crisis más dura vivida en muchos años. Y al mismo tiempo, se ha hecho todo lo posible por pagar las deudas adquiridas, como las hipotecas, al tiempo que se ha evitado contraer nuevos compromisos con los bancos.

Antoni Riera señala que el consumo de los baleares está creciendo, pero sin endeudarse. Este aumento se sustenta en la recuperación del empleo (más miembros de la familia pueden llevar dinero a casa) y en la ligera subida de los salarios que se ha iniciado. Es decir, se gasta más, pero se gasta el dinero que hay en el bolsillo, sin pedir préstamos. Eso explica también el exceso de liquidez que hay en estos momentos en el mercado y las facilidades con las que las entidades financieras vuelven a ofrecer crédito.

Administraciones y particulares

La reducción de la deuda a lo largo del último año ha sido especialmente impulsada por las Administraciones públicas, cuya financiación se ha desviado en buena medida hacia el fondo de liquidez autonómica. Así, el crédito pendiente del sector público ha bajado de los 2.485 millones de euros de junio de pasado año a los 1.937 millones de ese mismo mes del presente ejercicio. Por su parte, en el caso de familias y empresas se ha bajado en ese mismo periodo de 29.795 millones de euros a 29.514 millones.

Por contra, el esfuerzo ahorrador que se ha registrado durante el último año tiene su peso en los particulares. Las reservas económicas que éstos tienen depositadas en las entidades bancarias, y que en junio del pasado año ascendían a 21.170 millones de euros, a mediados del presente ejercicio se situaban ya en los 22.620 millones. Por su parte, las Administraciones públicas han pasado de los 836 millones de euros a los 1.079 millones.

Un dato a tener en cuenta es que la punta del ahorro balear se produce durante el tercer trimestre del año (coincidiendo con el auge de la temporada turística), y todo apunta a que se ha batido el récord histórico de 23.888 millones alcanzado durante el verano de 2016.

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