El Govern acordó ayer con los consells de Mallorca, Menorca y Formentera traspasarles las competencias de residencias y centros de día para ancianos y dependientes, de servicios de promoción de la autonomía personal, de financiación de plazas concertadas y de centros de empleo de discapacitados. Esta transferencia tiene un coste de 20 millones.
El consell insular de Eivissa ha quedado fuera del acuerdo porque devolvió esas competencias al ejecutivo autonómico en 2015 y tiene que constituir un consorcio dotado de la estructura administrativa precisa para volver a ejercerlas.
De esta forma lo explicó su presidente, Vicent Torres, tras participar en la reunión de la comisión mixta de transferencias Govern-Consells Insulars, presidida por la jefa del Ejecutivo autonómico, Francina Armengol, y a la que asistieron además las conselleras de Servicios Sociales y Presidencia, Fina Santiago y Pilar Costa, y los presidentes de Mallorca, Miquel Ensenyat, Menorca, Susana Mora y Formentera, Jaume Ferrer.
La presidenta Armengol destacó que la transferencia de estas competencias, dotadas con 20 millones de euros, será efectiva desde el inicio del año próximo y que supondrá la puesta en práctica del principio de que las competencias cercanas a los ciudadanos las gestionan mejor las administraciones más próximas, una máxima que su Govern también defiende respecto al Estado.
La consellera Santiago explicó que el acuerdo contempla pasar al Consell de Mallorca la titularidad y gestión de la residencia Sant Miquel y el Centro de Día Oms por 4,2 millones de euros; y la titularidad y gestión del centro de estancias diurnas de Can Clar (Llucmajor) y los servicios de promoción de la autonomía persona de Son Bru, Can Real y Son Perxana, por 446.414 euros.
Además, incluye la financiación de la concertación de reserva y ocupación de plazas para gente mayor que tenga reconocida la situación de dependencia en centros geriátricos y centros de día públicos, por 13 millones de euros.
