El histórico Monte de Piedad de Balears, que abrió sus puertas en 1882, ha cambiado de manos. La Fundación Montemadrid ha comprado la entidad por seis millones de euros a BMN-Sa Nostra, por lo que se incorpora a una red de montepíos que incluye los de Granada, Córdoba y Alicante, entre otros.

El traspaso contempla un cambio de sede, pero no variará su actividad. El Monte de Piedad de Balears seguirá ofreciendo crédito mediante el empeño de joyas, relojes y pequeñas piezas de plata a un interés que se sitúa entre el 5 y el 8,25 por ciento.

"Esto no es una absorción sino una integración", valoró ayer Santiago Gil, director de la Fundación Montemadrid. "Somos una organización sin ánimo de lucro. Todos los réditos irán destinados a fines sociales en el ámbito de la cultura, la educación y la asistencia", explicó.

Gil defendió las ventajas de acudir al Monte de Piedad en un momento de apuro económico, en contraste con las alternativas que ofrecen entidades financieras o casas de compraventa de oro. "Guardamos la joya durante un año -renovable- para que el cliente tenga tiempo de recuperarla, pagando un interés muy asequible. El 96 por ciento recuperan sus joyas. Solo un 4% van a subasta", subrayó.

Actualmente esta organización almacena en sus cajas activos valorados en unos seis millones de euros. Cuenta en las islas con alrededor de 5.000 clientes que mantienen 6.000 operaciones activas.

Gil expresó su confianza en que, en esta nueva etapa, el Monte de Piedad incremente su volumen de operaciones y gane presencia en la sociedad. Pese a ser una institución centenaria, sigue habiendo mucho desconocimiento sobre su actividad.

A modo de incentivo, los nuevos gestores ofrecerán a los clientes el 80 por ciento del valor de tasación del objeto que empeñen, frente al 70 por ciento estipulado anteriormente. "Aseguramos la continuidad de la institución", subrayó Gil.

"El crédito medio se sitúa en torno a los 600 euros. Pero aceptamos desde pequeñas joyas de 30 euros a piezas de 30.000", indicó el director de la Fundación Montemadrid.

La nueva propiedad, que aseguró que mantendrá todos los puestos de trabajo, espera abrir el Monte de Piedad a todo tipo de sectores. "Esto ya no es como hace décadas, cuando los campesinos venían a empeñar sus herramientas de trabajo. El perfil ha cambiado mucho. Ahora vienen profesionales liberales y autónomos que sufren algún apuro económico. Les ofrecemos un crédito fácil y con la posibilidad de recuperar la prenda cuando quieran", afirmó Gil.

La red de montepíos de la Fundación Montemadrid finalizó el pasado ejercicio con trece millones de euros de beneficio, de los que once se destinaron a fines sociales. El resto sirvió para pagar nóminas de los trabajadores y mantener la red.

"Contra la usura de los cambistas"

Las puertas del renovado montepío balear abrirán el próximo lunes. Ayer simularon una tasación para los medios gráficos: dos anillos de oro se tasaron en 280 euros. El cliente recibiría 220 euros y la garantía de cobrar la diferencia en caso de que se subastara por encima del precio de tasación.

Esta institución nació en 1882 en las islas "para luchar contra la usura de los prestamistas y cambistas que se enriquecían en una operativa exenta de control", informaron los nuevos gestores en un comunicado. La institución pionera fue el Monte de Piedad de Madrid, que nació en 1702.

El traspaso del centenario Monte de Piedad de Balears se enmarca dentro de la absorción de BMN-Sa Nostra por parte de Bankia.