El director de la Agencia Balear de Turismo (ATB), Pere Muñoz Perrugoria, ha puesto hoy su cargo a disposición del vicepresidente del y conseller de Turismo, Biel Barceló, para que sea el vicepresidente que decida si lo mantiene o lo destituye. Esta decisión viene a raíz de que Muñoz es uno de los cinco querellados por la Fiscalía Anticorrupción por los contratos a dedo de las conselleries gobernadas por Més con el jefe de campaña del partido, Jaume Garau.

De momento, Barceló no ha tomado ninguna decisión al respecto. El vicepresidente ha dicho hoy que "es una gran sorpresa" la inclusión en la querella de Muñoz, único de los dirigentes de Més denunciados que permanece en un cargo público. El vicepresidente y conseller de Turismo quiere esperar a ver de qué se acusa a Muñoz antes de tomar una decisión. Biel Barceló recordó que el Govern todavía no tiene ninguna notificación oficial de la querella y que el contrato que concedió la ATB a Garau se realizó de forma totalmente legal.

De todas formas, lo que ha trascendido del escrito de denuncia de Anticorrupción es que a la exconsellera de Cultura Ruth Mateu, el exdirector general de esta misma área, Jaume Gomila; al exdirector de el Institut d'Estudis Baleàrics, Josep Ramón Cerdà, y naturalmente al estratega electoral de Més, Jaume Garau, se les imputa un presunto delito de tráfico de influencias y prevaricación.

Las consellerias de Cultura, Medio Ambiente y Turismo, todas ellas gestionadas por Més, otorgaron contratos menores y negociados sin publicidad, lo que públicamente se conoce como contratos a dedo, a Jaume Garau, el hombre que dirigió su campaña electoral de las elecciones autonómicas del año 2015. El montante de los contratos adjudicados a las empresas de Garau ascendía a unos 150.000 euros. Este asunto, destapado por Diario de Mallorca, provocó una auténtica crisis de Govern que acabó con la destitución de la entonces consellera Ruth Mateu y gran parte de su equipo. Incluso Podemos también exigió la dimisión del vicepresidente Biel Barceló.