Un agente de la escala básica de la Policía Nacional recién salido de la academia cobra unos 1.450 euros limpios al mes. Un guardia civil en las mismas circunstancias, unos 50 euros menos. Un miembro de cualquiera de las policías autonómicas de España, unos 2.100 euros mensuales. La equiparación de los suelos de los miembros de los cuerpos de seguridad estatales a los autonómicos es una vieja reivindicación, y el principal caballo de batalla de Jusapol (Justicia Salarial de la Policía), un grupo que integra a unos 300 agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil de Mallorca.

Esta agrupación, que se ha extendido entre las plantillas de Policía y Guardia Civil de todo el Estado, ha convocado una concentración de protesta para el próximo día 28 en las principales ciudades. En Palma está previsto que se celebre mañana jueves frente a la sede de Delegación del Gobierno.

Fuentes de la agrupación en Palma explicaron que su principal reivindicación es acabar con la brecha salarial que les separa de las diferentes policías autonómicas. Estas diferencias se extienden a otros conceptos, como las horas extra -que en las cuerpos autonómicos son hasta el triple- o las pagas extraordinarias, que en la Policía están recortadas .

Desde Jusapol se quejan de que desde 2008 han visto descender sus salarios un 5%, y posteriormente solo han consegudio mejoras en las nóminas de un 1% en 2016 y otro 1% en 2017, mientras que el IPC ha subido un 12% en estos años.