La nacra, el molusco bivalvo más grande y longevo que hasta no hace mucho abundaba en los fondos marinos de Balears y de la mayor parte del litoral Mediterráneo peninsular, está padeciendo una tasa de mortalidad del cien por cien a causa de un parásito. Así lo indicó ayer el Instituto Nacional de Oceanografía (IEO), corroborando la noticia adelantada en exclusiva este domingo por DIARIO de MALLORCA en una entrevista a la directora del Centro Oceanográfico de Balears, Salud Deudero.de

Esta es una de las conclusiones que se reflejan en el estudio científico realizado desde el otoño de 2016 por investigadores, con el análisis de 1.600 nacras recogidas en 137 áreas, desde Gibraltar al Cabo de Creus.

El estudio, fruto de la colaboración entre expertos de diferentes centros de investigación y organismos gestores a nivel nacional, arrancó en otoño de 2016 en los censos subacuáticos de varias localidades de la costa mediterránea española con el objetivo de evaluar el alcance de la mortalidad masiva que afecta a las poblaciones de nacra y averiguar sus causas.

Este ha revelado elevadas tasas de mortalidad, de hasta un cien por ciento, en la mayor parte del litoral mediterráneo, incluido en las poblaciones de nacra de Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana e Illes Balears.

Sin embargo, las poblaciones de nacra de las costas catalanas todavía persisten, apunta este estudio con datos de las nacras en distintos hábitats y en un amplio rango batimétrico.

Para determinar el origen de la elevada mortalidad registrada en los últimos meses, los expertos han llevado a cabo análisis histológicos de ejemplares afectados. Los resultados de estos análisis exponen claramente la presencia de un parásito: un protozoo del género Haplosporidium dentro de la glándula digestiva de la nacra que, probablemente, es el patógeno que causa la mortalidad.

Pero aún se desconoce la vía de entrada del patógeno en la glándula digestiva de este molusco que, endémico del Mediterráneo, puede alcanzar los 120 centímetros de longitud y vivir más de dos décadas. Su inserción en el lecho marino es vertical, y por lo general habita en las praderas de posidonia y suele tener un color oscuro.

El estudio apunta que la mortalidad se ha propagado en muy poco tiempo, y alerta de que teniendo en cuenta el grado de impacto, la extensión geográfica y la alta probabilidad de que la infestación se encuentre aún en fase de expansión, podría ser considerado el mayor evento de mortalidad masiva jamás registrado para la nacra hasta la fecha.

La altísima tasa de mortalidad que registra la nacra ha llevado a la comunidad científica a recomendar la recatalogación de la especie a nivel nacional, de "vulnerable" a "situación crítica", catalogación aprobada aunque pendiente de publicación en orden ministerial.

Con la finalidad de adoptar medidas para evitar la extinción de la nacra, el pasado 18 de septiembre se decidió obtener un reservorio genético para evitar la extinción de la especie .

Para ello se llevará a cabo el rescate de parte de la población de nacras de las costas catalanas que aún no se ha visto afectada por la mortalidad. Estos ejemplares serán llevados a centros especializados donde serán criados en cautividad.