La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha afirmado esta mañana que con la detención en Cataluña de cargos públicos se ha cruzado "una línea roja", en una escalada en la que la "falta de diálogo", tanto por parte de la Generalitat de Catalunya como del Gobierno de Mariano Rajoy, ha llevado al "fracaso de la vía del diálogo" ante la renuncia a aplicar "la política" con mayusculas para solucionar un conflicto "político".

"Se ha cruzado una línea roja que conduce a una mayor ruptura social que debería haberse evitado", ha dicho Armengol quien ha emplazado una vez más a aplicar el "seny" y tender "puentes de diálogo" que conduzcan a una "salida pactada". La jefa del Ejecutivo balear ha insistido en que "un conflicto político exige una salida política con mayúsculas, no solo judicial".

Junto a ello, ha pedido "moderación" en las declaraciones de cargos públicos ante la gravedad de lo que está ocurriendo y que "no sólo afecta a Catalunya, sino también a todo el Estado" y por lo tanto a Balears. "En estos momentos hay que ser muy hábil y moderado en las declaraciones", ha insistido la presidenta quien ha incidido en todo momento en la "incapacidad de los dos gobiernos (el estatal y el catalán) para dialogar y buscar una solución consensuada" ya que en ambos hay "cero voluntad de ponerse de acuerdo".

"Nunca pensé que vería la detención de cargos públicos, como nunca pensé que vería al Parlament catalán adoptando decisiones que vulneran la legalidad", ha declarado tras emplazar de nuevo a recurrir a la "política con mayúsculas".

Armengol no ha querido pronunciarse sobre las declaraciones de Més, socio del PSOE en el Govern, calificando de "golpe de Estado" las detenciones en Cataluña, argumentando que son opiniones de un partido, si bien ha dejado claro que en la actual situación "es importante la moderación y medir las palabras".