El Govern tiene dos frentes ahora con el Gobierno: uno, el nuevo REB genera buenas expectativas aunque habrá que pelearlo; el otro, el cambio del modelo de financiación autonómica, que está estancado por la inactividad de Madrid que se "excusa" en el comité de expertos para no afrontar la prometida reforma.

Así lo considera la consellera de Hacienda y Administraciones Públicas, Catalina Cladera, que admite la actitud "positiva y colaborativa" del ministro Montoro en lo que se refiere al REB, pero a la vez critica su "falta de valentía para afrontar la reforma del sistema de financiación autonómico".

Tras la reunión mantenida esta semana entre Cladera y Montoro, empiezan ahora tres meses de trabajo para ir negociando con las diferentes secretarias de Estado un nuevo Régimen Especial para Balears, que el Govern aspira a que se parezca en lo máximo posible al que tiene Canarias. En teoría, a finales de año estará redactada una propuesta, que iniciaría y concluiría su tramitación como ley en 2018.

Por eso, ante este trimestre de reuniones que se avecina, Cladera consideró ayer, tras la reunión del Consell de Govern, que estamos en "la hora de la verdad" para ver hasta dónde es cierta la "buena voluntad política" mostrada hasta ahora por el Gobierno central con el REB. La consellera razonó que no van a conseguir todo lo que piden, aunque instó a "no aflojar el pulso" con Madrid en esta batalla y a mantener y hacer sentir el apoyo social y político a esta causa.

También hizo declaraciones ayer sobre este tema la presidenta Armengol, que valoró que dentro de ese negociación Montoro no ha descartado la creación de un fondo de insularidad que permitiría a Balears acometer mejorar en transporte público; ciclo del agua... Armengol calificó este reconocimiento de "paso importante".

Este régimen nuevo ya debería notarse en aspectos en los Presupuestos Generales del Estado para 2018. La consellera ha insistido en que Balears debe "exigir el máximo" al Gobierno para que en los próximos presupuestos generales se introduzcan el mayor número de inversiones y programas para el archipiélago.

Por ejemplo, señaló la necesidad de que se incluya una partida presupuestaria que permita aplicar el descuento del 75 % de residentes para el transporte aéreo y marítimo en las conexiones con la Península.

Tras el optimismo moderado respecto al REB, Cladera acusó al Gobierno de "no tener una actitud clara ni valiente" para afrontar una verdadera reforma del sistema de financiación autonómico y de prolongar demasiado el proceso: "Solo se simula que se trabaja con el comité de expertos y de técnicos", lamentó, pero "es una excusa". Ahora, lamentó, se habrá destinado todo 2017 únicamente a hacer una propuesta, que luego aún deberá ser debatida.

Y la negociación no será fácil ya que es un tema "muy complejo", ha admitido Cladera, y no todas las comunidades autónomas están de acuerdo. Aunque hay puntos en común, cada comunidad tiene sus peticiones.