Jaume Matas se ha declarado inocente de los cuatro delitos que le imputan la fiscal anticorrupción Laura Pellón y laabogada del Govern María Ángeles Berrocal por la contratación, entre 2004 y 2005, de los tres arquitectos que diseñaron y construyeron el velódromo Palma Arena. El expresident ha asegurado que la construcción del velódromo Palma Arena fue una decisión política y se ha desvinculado de la ejecución y materialización del proyecto.

La vista oral ha empezado en la sala primera de la Audiencia con la fase de admisión de nueva prueba documental y otros testigos. Matas, defendido por Josep Zaforteza, se enfrenta a cuatro años de cárcel y al pago de cerca de 800.000 euros de indemnización al Govern.

El segundo acusado, el exdirector general de Deportes, Pepote Ballester ha consignado los 16.000 euros de responsabilidad civil que se le reclaman y tiene la condición de acusado arrepentido. Se le pide una pequeña pena de cárcel suceptible de canjearse por una multa.

Jaume Matas ha asegurado durante su declaración que en 2004 tomó la decisión política de construir el velódromo Palma Arena para albergar el Campeonato Mundial de Ciclismo en Pista del 2007, impulsado por Cort. El acusado, no obstante y fiel a su estrategia mantenida en todo el caso Palma Arena, se ha desvinculado de la ejecución y materialización del proyecto.

Según Matas, el Palma Arena iba a contribuir a la desestacionalización turística en Mallorca y a paliar el déficit de infraestructuras deportivas de Palma para acontecimientos de ámbito mundial.