Al leer que "El huracán Irma deja en la isla zonas devastadas como si hubiera caído una bomba atómica", pensé que se referían a la defenestración en la Federación Hotelera de Mallorca. La política siente horror por el vacío, así que nuestro compromiso con el periodismo como servicio público nos obliga a colaborar en la oferta laboral para contratar a un nuevo presidente de los hoteleros.
Al margen del perfil idóneo, la primera condición para captar a un presidente es un salario atractivo. Pues bien, la percepción del máximo ejecutivo de la Federación Hotelera asciende a 250 mil euros anuales. En efecto, es el mayor sueldo del responsable de una institución pública de Mallorca, con la posible excepción de Maheta Molango. Cuadruplica los emolumentos de Francina Armengol, que debería cobrar todavía menos.
El sueldo de los presidentes de la Federación Hotelera tiene una curiosa historia. Los titulares del cargo no cobraban hasta la llegada de Pedro Cañellas, el primer presidente de los hoteleros casi sin hoteles, que percibía en torno a los cien mil euros anuales. Al acceder al cargo Antoni Horrach Moyá, renunció a cualquier percepción por el desempeño presidencial.
El aumento de sueldo desde los cien mil a los 250 mil euros actuales supone un 150 por ciento. No está mal, para un sector que ofrece un incremento del 1,1 por ciento anual a sus trabajadores. Se alegará que el presidente ha de aguantar a los hoteleros, y que eso hay que pagarlo. A propósito, la comida del viernes pasado en el hotel Albatros fue abonada por las asociaciones de zonas turísticas. El próximo viernes se celebra otro ágape de despedida a Inma de Benito, ahora a cargo de la Federación.
La clasificación Times Higher Education World University Rankings 2018, basada en una auditoría de Price Waterhouse Coopers, jerarquiza a miles de universidades en todo el mundo, con Oxford y Cambridge en cabeza. No vamos a entrar en las excelentes posiciones de los campus catalanes, porque aquí no nos dedicamos a la información internacional. Pero sí vamos a reseñar que entre los mil primeros centros universitarios del planeta figuran Almería, Murcia, Jaén, Granada, Vigo, A Coruña, Alicante, Castilla-La Mancha, La Laguna, Oviedo,...
Los lectores más suspicaces habrán observado que en la relación se echa en falta la Universitat de les Illes Balears. Sirva como consuelo que podemos labrarnos un hueco entre las dos mil primeras. Bueno, o entre las tres mil. A propósito del peculiar concepto de la investigación que tienen algunos científicos en la UIB, pongo al Richelieu de Llorenç Huguet por testigo de que con motivo de las elecciones a rector, le garanticé que "el Minerval será archivado por este juez". Así ha ocurrido, la predicción tenía escaso mérito, frases como "a ver si estoy condenando a un futuro Premio Nobel" son esclarecedoras.
En resumen, los imputados son tan inocentes como Jaume Matas en el caso Bitel, a cargo del mismo juez y en aquel caso con el consuelo de la intervención memorable del fiscal Miguel Ángel Anadón. A partir de ahora, los profesores pueden vender en el campus de la UIB sustancias farmacológicas o toxicológicas sin necesidad de titulación médica alguna. Incluso pueden sacar a la venta el mobiliario. Más madera.
A menudo me preguntan por qué suelo criticar más que alabar. Mabel Dodero, la secretaria de Camilo José Cela en Mallorca, fue un paso más allá:
—¿Has hablado alguna vez bien de alguien?
La respuesta es más cruel de lo que piensan. En cuanto elogio, me desmienten. Verbigracia, compongo una elegía del bar asesinado en Palma, y a Ella le falta tiempo para rebatirme:
—Ha muerto de su propio éxito, eran incapaces de preparar un bocadillo decente que pudiera competir con Burger King, o los diez montaditos sin sabor, la Coca-Cola era Pepsi, y solo era Coca-Cola si te peleas con el camarero, pedir un martini (caro carísimo) y darte de cualquier marca blanca asquerosa, del café mejor ni opino, solo he bebido uno peor y más frío en el Bosch, no tienen ninguna especialidad ni ningún tipo de referencia, y tal vez es el bar mejor situado de España. Hay negocios que mueren y negocios que los matan, éste es uno de ellos.
Toma TripAdvisor. Créanme, si necesitan ser criticados, no lo dejen en manos de aficionados. Pónganse en manos de un profesional, les costará menos de 250 mil euros. De acuerdo con mi triste experiencia, si hablas bien de alguien se enfadan sus enemigos, pero sobre todo se indignan sus amigos. En cambio, si hablas mal de alguien se alegran sus enemigos, pero sus amigos alcanzan el orgasmo. Sales ganando.
Si les sirve de consuelo, el patrimonio cultural mallorquín en el extranjero está tan descuidado como en casa. Sirva como ejemplo la sinagoga Mayor, oído a la analogía fonética, levantada por los judíos expulsados de Mallorca en el barrio Hasköy de Estambul. Ha hallado acomodo literario en novelas de culto como Brújula, que le valió el Goncourt a Mathias Enard. En la imagen que hoy nos ilustra, puede apreciarse el precario estado del edificio. Las autoridades de la ciudad turca pretenden reformarla y convertirla en un centro cultural. Vean La niebla y la doncella, que mejora la novela del siempre meritorio Lorenzo Silva y es la primera película en la que Quim Gutiérrez está a punto de lograr una interpretación. Claro que yo solo tuve ojos para Verónica Echegui.
Reflexión dominical compensatoria: "El PP se merecía algo mejor que Rajoy".
