La consellera de Hacienda, Catalina Cladera, afirmó ayer que la última balanza fiscal entre Balears y el Estado, correspondiente a 2014, "confirma el trato fiscal que reciben las islas, totalmente injusto, y reafirma plenamente" la exigencia del Ejecutivo balear de negociar un nuevo sistema de financiación y un incremento de las inversiones estatales. La balanza fiscal de 2014 muestra que Balears aportó al Estado 1.516 millones de euros más de los que recibió.

Aquel año, según concluyó el Govern a partir de estos datos, cada ciudadano de las islas "aportó casi 1.400 euros al Estado, que fueron a parar a la dotación financiera del resto de comunidades autónomas, a excepción de Madrid, Catalunya y la Comunidad Valenciana, únicos territorios que, como Balears, también presentan balanzas fiscales negativas con el Estado".

Este déficit fiscal, según sostuvo el Ejecutivo balear a través de un comunicado, se basa en lo que se refiere a los ingresos en recibir menos dotación financiera y de inversiones desde el Estado. A su vez, en lo que se refiere al gasto, Balears debe aportar una mayor parte de los impuestos recaudados en las islas en comparación con el resto de los territorios del Estado.

La balanza fiscal publicada el jueves por el ministerio de Hacienda muestra que el déficit de Balears alcanzó en 2014 el 5,77 % del Producto Interior Bruto (PIB) regional, lo que sitúa a las islas como la segunda comunidad autónoma con mayor déficit proporcional después de Madrid.

De acuerdo a los datos del Ministerio, en el cuatrienio 2011-2014 Balears acumula un déficit fiscal de casi 6.200 millones de euros, mientras que el resto de comunidades,a excepción de la valenciana, Madrid y Catalunya, tienen saldos positivos. Salvo con estas comunidades, "la aportación económica de los ciudadanos de Balears sirve para ser repartida entre el resto de las comunidades del Estado", afirmó el Govern.