La carretera de Palma a Manacor puede decirse que es una de las autovías más caras de España. La concesión mediante el sistema de peaje en sombra supondrá que esta infraestructura nos llegue a costar a todos los mallorquines la friolera de 560 millones de euros. Un sistema de pago impulsado por el Consell presidido por Maria Antònia Munar en 2005 y que supondrá que en el año 2042, cuando termina la concesión, el precio de la obra, valorado en 145 millones, se haya triplicado.

Es cierto que la empresa concesionaria también se hace cargo del mantenimiento de la carretera durante la duración de la concesión, pero si comparamos el coste del desdoblamiento de la carretera de Campos a Llucmajor (42 millones) o lo que costó la autopista del aeropuerto hasta Llucmajor en 2003 (38 millones), vemos que la carretera de Palma a Manacor es una de las más caras de España.

Mercedes Garrido, consellera insular de Territorio e Infraestructuras del Consell de Mallorca calificó a esta carretera como "una hipoteca muy grande" para las arcas de la institución insular. Hay que tener en cuenta que el Consell en los últimos años está pagando a la concesionaria una media de unos 12 millones de euros anuales para hacer frente al coste de la obra y el mantenimiento. Sin embargo, las previsiones que figuran en el contrato de adjudicación aumentan de forma considerable a medida que se acerca el final de la concesión. Por este motivo, desde los años 2030 al 2041 está previsto que la institución insular llegue a abonar a la empresa concesionaria, UTE Carretera Palma-Manacor, entre 20 y 22 millones de euros cada año.

El sistema de peaje en sombra fue el elegido por Munar y su equipo para construir esta autovía sin necesidad de desembolsar todo el dinero. Se adjudicó a varias empresas que construyeron la carretera desdoblada a cambio de cobrar un canon anual. Este canon se calcula en función de numerosos parámetros. El más importante hace referencia a que el Consell pagará 0,0244284081 euros por kilómetro de todos y cada uno de los vehículos ligeros que circulen por la carretera. En el caso de los camiones y autobuses el canon es de 0,038855225 euros por kilómetro y vehículo.

Asimismo, se contabiliza la siniestralidad, de forma que el Consell paga más en el caso de que se reduzcan los accidentes de tráfico en la autovía. A todo ello hay que añadir que, en el contrato adjudicado por Munar, en caso de que la previsión de vehículos establecida no se cumpla, el Consell se hará cargo de pagar hasta la cifra de coches estipulada para evitar que la concesionaria pierda dinero. Asimismo, hay que recordar que el Consell adelantó 35 millones para poder iniciar las obras.

Mauricio Rovira, portavoz del PP en el Consell de Mallorca y responsable de Territorio y Carreteras durante la pasada legislatura, indicó: "Desde el primer momento descartamos volver a adjudicar una obra de las numerosas que impulsamos el pasado mandato mediante el peaje en sombra, a raíz de lo gravoso que es para el Consell la carretera de Manacor. Es una auténtica ruina para la institución. Al Consell le harían un favor muy grande si la concesionaria renunciara o la empresa se declarara en quiebra, ya que el presupuesto anual de Carreteras, incluido el dinero que viene del convenio con el Estado, no supera los 75 millones".

El pasado año, el Consell abonó a la concesionaria 12,5 millones de euros. En 2015 fueron 11,7, mientras que en 2014 estuvo en torno a los 11 millones, cantidad similar que en los años anteriores. Las previsiones que estipula el contrato es que el número de vehículos se incremente año tras año y, por consiguiente, el canon de peaje en la sombra que abona el Consell llegará a los 22 millones anuales en 2040.

El Caso Peaje sobrevuela

Las obras de la carretera de Manacor está judicializado en la Audiencia Provincial. Es el llamado "Caso Peaje" donde se investiga un sobrecoste de la obra de unos 41 millones de euros. Varios peritajes consideran que se pagaron 41 millones en concepto de obras que no se realizaron, además de desviaciones en conceptos que nada tienen que ver con la construcción de la carretera. Este sobrecoste fue denunciado por el Consell de Mallorca durante la legislatura que fue presidido por la actual presidenta del Govern, Francina Armengol. En la demanda interpuesta por la institución insular se reclama a la concesionaria que se devuelva estos 41 millones de euros.

Según los peritos, el coste real de la obra realizada ascendería a unos 103 millones, no 145 como se están pagando. En este proceso judicial están imputados el entonces conseller de Carreteras del Consell con Maria Antònia Munar, Antoni Pascual, así como varios cargos de su equipo que participaron en la polémica adjudicación del peaje en la sombra.

En el caso de que la demanda se resuelva a favor del Consell, el coste final de la carretera, así como el canon anual, puede verse reducido de forma importante y aliviar las arcas de la institución insular mallorquina.