La suspensión del rescate del túnel de Sóller por parte del juzgado de los contencioso número tres tendrá consecuencias para el mantenimiento del de sa Mola, que une Sóller con el Puerto de Sóller, si el juez no levanta la medida cautelar antes del 1 de septiembre, cuando el rescate por parte del Consell debía hacerse efectivo. Según explicó ayer la consellera insular de Territorio, Mercedes Garrido, con el rescate, entraba también en vigor la concesión del mantenimiento acordada en julio a una unión de empresas temporales (UTE), a la que se adjudicó en el mismo lote el mantenimiento de los túneles de Sóller y de sa Mola por un importe global de unos 700.000 euros anuales. Si se mantiene la suspensión del rescate, la conservación del túnel de Sóller seguiría a cargo de la concesionaria Globalvia pero el de sa Mola quedaría sin cubrir.
"Esta decisión judicial nos obliga a suspender el contrato de mantenimiento para los dos túneles, con lo que la UTE a la que se adjudicó podría pedirnos indemnización por los perjuicios económicos, además de los perjuicios a los ciudadanos que tendrán que seguir pagandotendrán que seguir pagando por pasar por el túnel de Sóller", resaltó Garrido.
Este es uno de los argumentos que esgrimirá el Consell en su respuesta al juzgado, que entregará hoy junto con el expediente del rescate del túnel de Sóllerexpediente del rescate del túnel de Sóller. Junto a ello, alegará que no tiene sentido considerar que si se hace efectivo el rescate en la fecha prevista supondría un perjuicio económico para Globalvia si después los tribunales dan la razón a la concesionaria, que calcula que debería recibir del Consell unos 31 millones de euros, frente a los 17,4 millones que fijó la institución insular como coste del rescate. En este sentido, Garrido recordó que si lajusticia da la razón al final a Globalvia el Consell tendría que pagar la diferencia, para lo cual no afecta que el rescate entre en vigor el 1 de septiembre. "Los posibles perjuicios son evaluables económicamente y en estos casos la jurisprudencia avala situaciones similares a la efectividad del rescate del túnel de Sóller por parte de la administración", insistió la responsable insular de Territorio.
Medidas cautelarísimas
Garrido acusó a Globalvia de haber "actuado con mala fe" al presentar su recurso pidiendo "medidas cautelarísimas, que implican la suspensión inmediata del rescate", cuando técnicos del Consell y de la concesionaria estaban trabajando este mes para dejar todo listo con el fin de que el 1 de septiembre se levantara la barrera del túnel de Sóller y fuera gratuito para los usuarios.
El pasado viernes, el juzgado de lo contencioso número 3 comunicó al Consell su decisión de suspender cautelarmente el rescate a petición de la concesionaria, una decisión que sorprendió a la institución insular. Se da la circunstancia de que el juez que adoptó esta decisión es el mismo que suspendió ayer el derribo de sa Faixina.
El Consell disponía de tres días para presentar el expediente administrativo al juzgado y dos días más para contestar a la demanda de medidas cautelarísimas, aunque la institución insular entregará hoy todo. Una vez recibida esta documentación, el juez decidirá si celebra o no una vista para escuchar a las partes antes de levantar o mantener la suspensión del rescate, ya que puede considerar que con la documentación dispone de datos suficientes para decidir.
Si al final no se celebra una vista, la decisión podría adoptarse antes, tal y como desea el Consell. Garrido confió de nuevo ayer en que el juez actúe con la misma celeridad para adoptar una decisión que la que ha aplicado ante la petición de la concesionaria, ya que de lo contrario será muy difícil que el túnel de Sóller sea gratuito desde el 1 de septiembre
