Los empresarios isleños están convencidos de que este verano van a hacer su 'agosto', o lo que es lo mismo, alcanzar un nivel de ingresos desconocido desde hace mucho tiempo. Esta es la conclusión a la que se llega desde el Instituto Balear de Estadística (Ibestat), a la vista de que el nivel de confianza empresarial se encuentra en estos momentos en sus niveles máximos desde 2013, cuando comenzaron a realizarse estos informes.
La confianza de los empresarios isleños, además de situarse en esos niveles máximos, deja muy atrás la que se da en el conjunto del país, pese a que esta última también es positiva aunque más moderada. En concreto, este índice triplica en el archipiélago el de la media estatal.
Es evidente que las cifras récord del sector turístico tienen mucho que ver con todo esto, porque es en los segmentos de la hostelería y los transportes donde esas buenas expectativas están más acentuadas, hasta el punto de duplicar la media balear, aunque son también los que suelen presentar la mayor debilidad durante el invierno.
Estas actividades, especialmente vinculadas con el turismo, son también las que muestran el mejor balance en el conjunto de España. La diferencia radica es que los niveles de optimismo balear triplican a la media estatal. O lo que es lo mismo, las empresas turísticas esperan hacer mucho más dinero durante esta temporada alta. Un dato a tener en cuenta: la confianza empresarial de este sector se mantiene en tasas estivales muy elevadas desde 2015, y el principal avance se registra durante la temporada baja, con opiniones cada vez menos negativas, lo que se interpreta como el reflejo de la prolongación que se está dando en los periodos de llegada de visitantes.
El segundo sector en el que se respira un mayor nivel de euforia es el comercio, aquí ya más próximo a la media del archipiélago pero que multiplica por cuatro el que se da en el conjunto de España. En cualquier caso, se trata de otra actividad con una fuerte estacionalidad, lo que supone que el nivel de confianza de sus empresarios durante los meses invernales se sitúa en los niveles más bajos de las islas.
La construcción es el sector que presenta una mejoría estructural más notable. Aunque su nivel de confianza es positivo, supone la mitad del que se da para el tercer trimestre del conjunto de Balears. La diferencia es que esa tasa positiva se mantiene tanto en invierno como en verano desde que se inició 2016.
Por lo que respecta a la industria, es la que presenta la situación de mayor debilidad, y aunque de carácter positivo, se sitúa incluso por debajo de la media española, lo que refleja que se trata de la actividad que más tarde se ha incorporado a la fase de recuperación.
