La avería informática que colapsó el Servei de Salut fue la responsable de la rueda de prensa de ayer toda vez que Fuster había proclamado en la convocatoria del primer trimestre del año que esa sería su última comparecencia para facilitar datos de las listas de espera, toda vez que a partir de entonces se podrían consultar por internet. Sin embargo, los problemas informáticos impidieron cumplir con este ejercicio de transparencia contemplado en los acuerdos de gobernabilidad.

Por ello, Fuster acudió a la convocatoria de ayer acompañado de Antònia Salvà, subdirectora de sistemas de información del IB-Salut, que señaló que se van a invertir 10 millones de euros en la renovación de unos sistemas informáticos en los que, apuntaron, en el periodo 2011-2015 no se ha invertido nada.

Sobre la avería del pasado junio y sobre la ausencia de un sistema espejo replicado que se ponga en funcionamiento cuando falle el original, algo básico en un sistema que maneja información tan vital como la del IB-Salut, Salvà señaló que los sistemas "críticos" cuenta con este sistema duplicado y circunscribió los problemas de los médicos para acceder a las historias médicas a los hospitales sociosanitarios General y Joan March. Y prometió que en 4 ó 5 meses todos los sistemas de información, críticos o no, estarán replicados.