Técnicos del Ayuntamiento de Palma talaron ayer el centenario ficus de la Plaza de España por motivos de seguridad para los viandantes, debido a la gran fisura que había en el tronco y que ponía en peligro la estabilidad del árbol.

Esta fisura, podía haber provocado la caída de las dos grandes ramas de este ejemplar sobre la vía pública, con "grave peligro" para los peatones que pasan por esta plaza tan concurrida.

Un ciudadano, un profesional de una empresa privada de jardinería, se dio cuenta de esta fisura e informó el viernes por la tarde de manera inmediata a los técnicos municipales. Gracias a este aviso se ha podido actuar de manera rápida y resolver la situación.

La falta de lluvias regulares los últimos meses habría incrementado la sequedad del tronco con la consecuente pérdida de elasticidad, lo que habría provocado esta grieta.