La Policía no tiene ninguna duda. Detrás del concurso de la ORA de Palma, supuestamente amañado, hubo un pago en metálico por parte del adjudicatario a Álvaro Gijón, en ese momento uno de los políticos más influyentes del Ayuntamiento de Palma. Un soborno que el empresario Antonio Roig pagó en metálico, según sostiene la Policía, a través de tres plazos y ello "a medida que veía que la otra parte, el señor Gijón, cumplía escrupulosamente con lo prometido, esto es, daba muestras reales de que éste ganaría el concurso", según concluyen los investigadores.

En el detallado informe que el Grupo de Blanqueo de la Policía elabora para el juez Penalva se realiza un análisis de las fechas claves de la tramitación del concurso de la ORA y las maniobras que realiza Álvaro Gijón para blanquear este dinero. Así, la primera operación se sitúa en el mes de septiembre de 2012. Es el periodo en el que se elaboran los pliegos del concurso y la Policía está convencida de que Roig abona "una importante cantidad de dinero al señor Gijón". Al mes siguiente, el diputado realiza una operación con su hermano Teo (detenido esta semana). Álvaro le compra a su familiar la sociedad Binidelta por 9.800 euros. Esta sociedad posee un piso en la calle Prevere Rafael Barrera, de un precio aproximado de 150.000 euros. Los investigadores están convencidos de que el político le paga en metálico el dinero a su hermano para quedarse con esta vivienda.

Esta operación entre hermanos ha sido ampliamente estudiada por la Policía, que llega a la conclusión de que "constituye un claro y evidente acto de opacidad y ocultamiento por parte del señor Gijón". La compra de la sociedad se realiza ante un notario, pero según recalca la Policía, esta operación no se comunica ni a Hacienda, ni al Registro, de tal forma que en estas instituciones Teo sigue siendo el dueño de la empresa propietaria de este piso.

Segundo pago

El siguiente pago lo situa la Policía cuando se produce la intervención de la comisión técnica que otorga más puntuación a la oferta de Roig que a los otros competidores. Ello se produce el día 21 de marzo de 2013 y es en esta fecha, según resalta el informe policial, cuando se produce la siguiente maniobra para blanquear dinero. Se utiliza la empresa familiar Fiestaclass, administrada por la madre y el hermano de Gijón, que acuden al notario y "simulan un reconocimiento de deuda por un importe de 229.548 euros". La Policía tiene muy claro que se trató de una operación "del todo falsa e irreal, que no es más que la creación del instrumento adecuado para introducir en el tráfico económico legal parte del dinero ilícitamente obtenido".

En esta operación se hace constar que la madre realiza un préstamo por esta elevada cantidad. Gijón declaró al juez Penalva que este dinero nunca existió, que se refería al sueldo que la madre no cobraba por la tienda que dirigía y que para cerrar la actividad del negocio, se tuvo que acudir a esta fórmula del préstamo. La Policía, sin embargo, realiza una interpretación muy distinta de esta maniobra y tiene claro que se trata de una operación simulada, para aflorar parte del soborno que habría recibido el político que esta semana se ha dado de baja del PP. La Policía ha comprobado que la madre de Gijón nunca tuvo la capacidad económica para prestar el dinero que figura en el documento de préstamo.

El tercer pagó, según sostienen los investigadores, se produce cuando el Ayuntamiento de Palma ya ha firmado el contrato de la ORA. En ese momento se entrega el dinero cuando ya "no queda duda ni resquicio alguno de que su amigo regidor (Gijón) le ha hecho ganar el concurso".

En ese momento es cuando, según refleja el informe, Gijón recurre "a uno de los mecanismos más habituales utilizados para blanquear dinero, que no es otro que la utilización de testaferros ajenos a la familia más directa (para hacer así difícil su localización) para constituir dos sociedades instrumentales". Un mes después de adjudicarse el concurso público, Gijón crea una sociedad con un ciudadano francés y otro con un oriundo de Argentina, que la Policía sospecha que son testaferros. Se trata de la sociedad Aldade Llebeig, cuya actividad solo dura cuatro meses. Esta sociedad recibe ingresos en efectivo por valor de 20.000 euros, además de otros 11.000 euros a través de un crédito. Esta empresa explota un restaurante de comida japonesa. Se da la circunstancia que uno de los socios capitalistas es un joven que llega poco antes a España para realizar un curso Erasmus en la UIB. Después se crea una segunda sociedad, llamada Wokstation. Aquí no aparece Gijón. La constituye uno de sus supuestos testaferros, que pese a ser una sociedad que no tiene ningún tipo de actividad, también mueve dinero.

La Policía destaca también pese a que el testigo protegido declaró en su día que la supuesta comisión del contrato se la repartieron entre Gijón y Rodríguez, hasta la fecha no se ha encontrado ninguna operación que demuestre la implicación del expresidente del PP de Palma. El Grupo de Blanqueo ha realizado consultas en el Registro Central del Notariado sobre Rodríguez y no se ha detectado que haya realizado ninguna operación sospechosa.