Los dos abogados a los que se atribuye la grabación clandestina de la infanta Cristina, durante su declaración ante el juez Castro, Francisco Carvajal y Mari Carmen Jiménez, esán siendo juzgado este lunes en Vía Alemania. La Fiscalía pide un año de prisión para cada uno de ellos por un delito de desobediencia.

El primero en prestar declaración ha sido Francisco Carvajal. El letrado andaluz ha negado ante la jueza de lo penal 6 de Palma haber accedido a los juzgados de Vía Alemania con aparatos de grabación. Carvajal ha argumentado que la prohibición de Castro previa a la declaración de doña Cristina era introducir instrumentos de grabación, pero no incluía la filmación de la hermana del Rey.

Por su parte, Mari Carmen Jiménez también ha negado ser la autora del vídeo al no haber entrado ningún aparato de grabación en la sala y ha explicado que algunas funcionarias, que estaban sentadas junto a los abogados defensores, cuchicheaban durante el interrogatorio de la infanta doña Cristina. Una de esas funcionarias se ausentó de la sala de vistas pasadas una hora y media y ya no regresó, lo que parece sospechoso a la acusada.

La fiscal Concha Ariño reclama un año de cárcel para Carvajal y su compañera de despacho Carmen Jiménez por desobediencia. El abogado ha explicado que pasó cinco controles de seguridad antes de entrar en los juzgados y que estaba acreditado como defensor del entonces imputado Robert Cocks, un testaferro de Iñaki Urdangarin. En los controles le incautaron el ipad y el teléfono móvil."LLevaba también un bolígrafo, pero de los baratos", ha dicho el acusado.