Las rupturas matrimoniales en Baleares han crecido de enero a marzo de este año, y en relación al mismo período del año pasado, casi un 5 por ciento, según datos facilitados hoy por el Consejo General del Poder Judicial. No obstante, Baleares se halla en la media española de crisis de parejas, con 0,7 casos por cada mil habitantes. El número de matrimonios que se rompió en las islas en ese período fue de 794 y la inmensa mayoría de las cuales optaron por el divorcio, una salida más rápida y expeditiva que la separación.

El número de demandas de disolución matrimonial -separaciones y divorcios- registradas en Baleares durante el primer trimestre de 2017 fue de 793, lo que representa un aumento del 4,54 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior que fueron 757, según los datos publicados hoy por la sección de estadística del Consejo General del Poder Judicial. A escala estatal, se registraron un total de 31.694 demandas de disolución matrimonial, lo que representa también un aumento del 4,8 por ciento respecto al primer trimestre del año 2016.

En las Islas se observaron incrementos interanuales en casi todas las formas de disolución matrimonial. Los divorcios contenciosos pasaron de 272 en el primer trimestre del año 2016 a 292 en el mismo periodo del 2017, un 7,4 por ciento más. Por otra parte, los 480 divorcios consensuados supusieron un incremento del 5,5 por ciento respecto de los registrados entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2016.

En cuanto a las separaciones, las 13 demandas de separación consensuada son un 50 por ciento menos que las presentadas en el primer trimestre de 2016 en Baleares; y las 8 separaciones no consensuadas son el doble de las registradas en el mismo periodo del año pasado.

Por último, en el archipiélago únicamente se presentó 1 demanda de nulidad en el primer trimestre del año.