La izquierda se lanzó ayer en bloque contra el PP por permitir que Álvaro Gijón continúe en su escaño en el Parlamento balear y en Cort, respectivamente. No es la primera vez que PSOE, Més y Podemos exigen la dimisión del diputado y concejal palmesano, pero sí la más contundente. Las nuevas revelaciones sobre el caso Cursach, con testigos situando al político conservador en supuestas fiestas sexuales con droga, invitado por el empresario del ocio encarcelado, al que presuntamente luego beneficiaba desde sus cargos, provocaron un terremoto político en la Cámara autonómica.

De todas las voces, la más contundente fue la del alcalde de Palma José Hila, quien dijo "sentir vergüenza" y "dolor de estómago" por que Gijón siga como concejal en el Ayuntamiento. El PP por su parte replicó reclamando respeto a la presunción de inocencia de su compañero, aunque en privado algunos dirigentes admiten la complicada situación y la mala imagen para la formación.

El diputado de Més per Mallorca David Abril destacó que el testimonio divulgado añade "gravedad a unos hechos que ya eran bastante graves". A su juicio, "la magnitud de las acusaciones de la testigo sobrepasan la corrupción y ya hablamos de prácticas mafiosas". Para Abril, "hace meses que Gijón no debería estar en esta Cámara y tendría que haber dejado el escaño", censurando la actitud del PP por no exigir su dimisión.

Por su parte, la diputada de Podemos Laura Camargo lamentó que "hoy [por ayer] vuelva a ser noticia Gijón, el político que se aferra a su escaño cuando está imputado por el caso ORA por haber participado presuntamente en una trama mafiosa en la Policía de Palma", apuntó. "Hoy es protagonista por unos testimonios que le vinculan con las orgías de droga y prostitución de Tolo Cursach y que afirman que Gijón participaba activamente en estas fiestas", indicó Camargo.

El alcalde socialista José Hila, exigió al PP que sin más dilación asuma responsabilidades y haga dimitir al popular: "La ciudad no merece tener a un concejal como Álvaro Gijón sentado en el pleno", recalcó. Hila cree que la destitución de Gijón urge para "recuperar la dignidad del pleno" municipal de Cort, y tachó de "gravísimas" las acusaciones que han trascendido, ya que "lo que dan a entender es una degradación y una forma de entender las cosas que está fuera de toda lógica".

"Hemos conocido en este último caso palizas a mujeres de las que se les acusa, orgías, droga..., superando todos los límites", afirmó Hila. "Hemos de dejar atrás esa época y esa ciudad Rodríguez que nos intentaron imponer", sentenció sobre el expresidente del PP de Palma, también implicado por la testigo. "Va siendo hora de que paguen lo que hicieron porque es evidente, cada vez que sabemos más, que traspasa todos los límites y que leer esas noticias da dolor de estómago", aseveró el alcalde, que recordó que hace ya casi un año que el gobierno municipal reclama la dimisión de Gijón.

"Cada vez que se conocen hechos son más graves", alertó Hila, quien señaló que el actual equipo de Cort "está plantando cara y está colaborando con la justicia y haciendo que esas personas acaben pagando el daño que hicieron a tantos ciudadanos que la lista sería muy larga". "La ciudad no merece tener a un concejal como Álvaro Gijón sentado en el pleno y la ciudad no merece a una portavoz como Marga Durán, incapaz de estar del lado de la justicia y de las víctimas, incapaz de exigir a Gijón que se vaya y de expulsar al señor Rodríguez del partido", insistió Hila, criticando también a la actual portavoz municipal del PP por su "incapacidad". "Como alcalde de Palma estoy indignado, quiero que se asuman responsabilidades y me da vergüenza que no haya sido así en un año que lo llevamos pidiendo", reiteró Hila.

Época de locura

"Ya va siendo hora de que el PP deje atrás esta época de corrupción, locura y de controlar la ciudad por medios que no eran los legales y que asuman su responsabilidad que no lo están haciendo", reiteró Hila, que acusó a Durán de estar "defendiendo al señor Gijón en lugar de exigirle responsabilidades". "Para mí, todo junto es impresentable", apostilló.

El portavoz del PSOE, Andreu Alcover, tachó de "insostenible" la permanencia de Gijón en el Parlament: "Si un 10% de lo que ha dicho la testigo es cierto, ya hace tiempo que debería haber dimitido", recalcó, además de mostrar su "sorpresa por la callada por respuesta de Biel Company y Marga Prohens" en este asunto. "Es una situación dolorosa y desagradable a nivel político y también a nivel personal", señaló la portavoz del PP", añadiendo que el partido "la está analizando con tranquilidad". Prohens dijo que llegado el momento, aplicarán su código ético.