Mallorca va a contar durante los meses de julio y agosto con 16 inspectores y subinspectores de trabajo llegados de la península para reforzar los controles que se van a llevar a cabo en materia de fraude laboral, y muy concretamente para luchar contra el que se produce con los contratos temporales y los de tiempo parcial. Este equipo tiene marcado el objetivo de llevar a cabo 65o controles durante ese periodo. A este grupo se sumarán otros ocho inspectores destinados a Eivissa, seis a Menorca y dos a Formentera. En total, 32 funcionarios llegados desde otras zonas del país que llevarán a cabo 1.300 actuaciones programadas.
Esta iniciativa se producirá después de que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y la presidenta del Govern, Francina Armengol, suscribieran ayer el correspondiente acuerdo de colaboración, en un acto celebrado en el Consolat de Mar durante el cual la primera puso a Baleares como ejemplo para todo el país en la creación de empleo. Al respecto, recordó que mientras que en España se han recuperado dos de cada tres puestos de trabajo destruidos durante la crisis, en el archipiélago esa recuperación ya es total.
Según se apuntó durante la presentación del acuerdo, este año se desarrollará la tercera campaña del plan de lucha contra la precariedad que se lleva a cabo durante los dos meses antes señalados. Durante las dos ediciones anteriores más de 11.000 contratos temporales se convirtieron en indefinidos y se detectaron unos 5.700 empleos irregulares, según subrayó la ministra.
Además, Báñez valoró el plan de empleo presentado el pasado lunes por el Govern, con el que se pretende potenciar la contratación de colectivos como los jóvenes o los mayores de 45 años. La ministra indicó que el Gobierno central va a colaborar con el Ejecutivo autonómico en el desarrollo es este plan con la aportación de 247 millones de euros durante el periodo 2017-2020 del total de 341 millones previstos para la ejecución de esta iniciativa, aunque desde el Govern se matizó luego que la titular de Empleo incluyó en esa cifra los fondos procedentes de la Unión Europea.
Defensa de la colaboración
Tanto Fátima Báñez como Francina Armengol pusieron en valor la colaboración entre Administraciones públicas, aunque la presidenta balear aprovechó la ocasión para deslizar algunas de las reivindicaciones del archipiélago frente al Estado, como la negociación de un régimen especial para las islas. Igualmente, advirtió de la necesidad de "ser valientes" y desarrollar un nuevo marco laboral que favorezca la recuperación salarial y la negociación colectiva, respaldando así las demandas que desde su Ejecutivo se vienen haciendo para que se derogue la reforma laboral impulsada por el Partido Popular.
A ello hay que sumar la petición del Govern de poder participar en la mesa de trabajo que se va a poner en marcha en materia de salud laboral y en la que se hará especial hincapié en la situación del colectivo de camareras de piso de los hoteles, una solicitud que fue aceptada por la ministra.
Calidad del empleo
Por lo que respecta al convenio de colaboración para el desarrollo de más controles durante el verano, el apoyo que esta iniciativa recibe por parte de patronales y sindicatos se puso en evidencia con la presencia de la presidenta de CAEB, Carmen Planas, y de los secretarios generales de CCOO y de UGT en las islas, José Luis García y Alejandro Texías respectivamente.
Tanto Fátima Báñez como Francina Armengol destacaron que el objetivo a perseguir no es solo la generación de nuevo empleo, sino también que éste sea de calidad, y para ello se puso de relieve la importancia de la lucha contra el fraude.
La ministra se mostró muy crítica con las irregularidades que se cometen en materia laboral, para empezar por lo que conllevan de vulneración de los derechos de los trabajadores y de competencia desleal frente a las empresas que sí cumplen con la legislación, pero además porque las cantidades que no se cotizan ante la Seguridad Social suponen un obstáculo a la hora de garantizar el modelo de bienestar y restan recursos para el pago de las pensiones.
A preguntas de los medios de comunicación, Báñez defendió también la reforma laboral impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy y recordó las reducciones del desempleo que se están dando entre el colectivo de jóvenes y de mayores de 45 años, pero no se pronunció sobre la elevada tasa de parados que no cobran ninguna prestación.
