La consellera de Territorio del Consell de Mallorca, Mercedes Garrido, anunció ayer que la institución insular no aumentará la parcela mínimapara poder construir en suelo rústico en la modificación del Plan Territorial de Mallorca que está a punto de iniciar. Mantendrá los 14.000 metros cuadrados exigidos para poder edificar en el campo. La avalancha de peticiones de construcción, a raíz del alquiler turístico, provocaron que desde la institución insular estudiaran esta posibilidad para poner freno a la urbanización del suelo rústico.

Garrido hizo publicas ayer las cifras de las solicitudes de autorización de obra presentadas en el Consell de Mallorca para la construcción de viviendas en suelo rústico. Según la consellera insular de Territorio, aumentaron en 2016 un 27%, al iniciarse un total de 294 expedientes de los cuales 196 fueron favorables. Un incremento que se debe, en parte, al alquiler turístico y al afán de los propietarios de sumarse al próspero negocio del turismo.

La responsable urbanística de Mallorca aseguró, durante la rueda de prensa que ofreció en la mañana de ayer, que no hay que alarmarse con estas cifras puesto que todavía se sitúan "muy por debajo" del llamado boomque se registró entre 1999 y 2000 y entre 2007 y 2009. En esos años se superaron con creces las 300 autorizaciones que a la postre han poblado gran parte del suelo rústico mallorquín durante la última década.

Una de las posibilidades que baraja el Consell, para frenar la avalancha de construcción en el campo generada por el alquiler turístico, es reducir la edificabilidad por parcela. Ello no impediría que la gente que tiene un terreno con 14.000 metros cuadrados pueda levantar una vivienda. Lo que si evitaría es que se puedan construir piscinas y otros servicios que requiere el alquiler turístico. "Es una realidad -afirmó Garrido- que el suelo rústico padece una presión que va en aumento y viene provocada por los beneficios económicos que da el alquiler vacacional".

La consellera insular de Territorio apuntó también que las "informaciones no ciertas" sobre el posible aumento de la parcela mínima y la mejora económica han potenciado el aumento de las peticiones. Garrido olvidó mencionar que fue ella misma quien apuntó a la posibilidad de incrementar la parcela en un programa de radio de IB3. En cualquier caso, la consellera insular quiso dejar claro que el Consell de Mallorca "no modificará la parcela mínima, que continúa y continuará en 14.000 metros cuadrados".

Las cifras del suelo rústico

El 60% de los expedientes de obra en suelo rústico son promovidos por personas físicas residentes en Balears y un 40% a extranjeros o sociedades, según territorio del Consell. De igual modo, en las solicitudes para la instalación de redes eléctricas en el campo han pasado de 104 a 131 expedientes, un 27% más en comparación con 2015.

Por lo que respecta al litoral, se ha pasado de las 297 solicitudes en 2015 a 338 el pasado año, con un aumento del 12%. "Estas autorizaciones se conceden a obra de nueva planta o a otros casos como la ejecución de una piscina o ampliaciones de viviendas", aseguraron desde el Consell.

Las células de habitabilidad han registrado un aumento del 20% al pasar 5.974 en 2015 a 7.539 en 2016. Las razones, relataron desde el departamento de Territorio, responden al aumento del alquiler vacacional, a la mejora de la economía y a la compraventa.