Un nuevo desmarque de Podemos en temas de carreteras provocó ayer una crisis importante en el seno del Pacto de Izquierdas que gobierna en el Consell de Mallorca. Los podemitas votaron en contra del proyecto de enlace entre la autopista de Inca y Lloseta, promovido por el departamento de Carreteras que dirige la socialista Mercedes Garrido. PSIB y Més tuvieron que recurrir a los votos de la oposición (El Pi, PP y Ciudadanos) para sacar adelante esta infraestructura.

Tanto PSIB como Més no escondieron su malestar por el hecho de que sus socios podemitas les dejaron en la estacada. A principios de año ya se abstuvieron cuando el proyecto fue aprobado de forma inicial. Ayer, la comisión informativa del Consell de Mallorca lo debía aprobar de forma definitiva. Sin embargo, socialistas y nacionalistas se quedaron en minoría.

El vicepresidente Jesús Jurado, líder de Podemos en el Consell, aseguró a este periódico que "hay mucha gente en nuestro partido que considera que este proyecto, especialmente en lo que se refiere al enlace de Lloseta, es impactante". Jurado añadió que está convencido de que esta situación no afectará a las relaciones entre los socios del Pacto: "Consideramos que tenemos derecho a discrepar. En este caso, se trata de una discrepancia pactada. Nosotros presentamos alegaciones para disminuir el impacto del proyecto, pero fueron rechazadas y, por este motivo, hemos votado en contra".

Jurado recordó que son tres partidos diferentes y este tipo de diferencias las calificó de "normales". La consellera insular de Territorio y Carreteras, Mercedes Garrido, no quiso entrar en polémicas al asegurar también que era una "discrepancia pactada".

Los socialistas celebraron en un comunicado la aprobación del proyecto, que venía siendo reclamado por los ciudadanos de Lloseta y Binissalem, sin mencionar que tuvo que ser aprobado con la ayuda de la oposición. El enlace de la autopista de Inca con Lloseta tiene un coste de 9,5 millones de euros.

Pastor exigió destituciones

La reacción de la oposición ante esta nueva crisis no se hizo esperar. El portavoz de El Pi, Antoni Pastor, exigió ayer al presidente del Consell, el nacionalista Miquel Ensenyat, que "destituya de forma fulminante de todos sus cargos a los de Podemos". Según Pastor: "Es inaceptable que el vicepresidente (Jesús Jurado) vote en contra de los proyectos que presenta su gobierno y además se le premie con más responsabilidades", en relación a la remodelación del organigrama que crea nuevas direcciones insulares.

El portavoz de El Pi insistió en que "es inadmisible que Podemos pase a tener más responsabilidades de gobierno cuando son unos socios que traicionan al gobierno con su voto".