La noche grande de la Asociación y Federación de Empresarios del Comercio de Balears (Afedeco) se convirtió ayer en todo un clamor por el comercio tradicional "que aporta identidad" ante a las múltiples amenazas que acechan al sector: las grandes superficies, las franquicias, la venta ambulante ilegal y ese gigantesco almacén que es Internet, que si bien es considerado competencia, puede ser también una oportunidad para el pequeño comercio.

Estos fueron algunos de los retos de futuro que se deben afrontar, según desgranó el presidente de Afedeco, Rafael Ballester, quien lamentó que estén cerrando "los locales más tradicionales, los que nos dan identidad, para convertirse en modelos de negocio importados. Esta situación nos está asfixiando", denunció durante su discurso con motivo de la 16 edición de la Nit del Comerç, celebrada en el flamante Palacio de Congresos.

Por su parte, el vicepresidente del Govern, Biel Barceló, alabó estos establecimientos de proximidad que contribuyen a tejer redes sociales y "ayudan a crear un modelo de pueblo, de ciudad, que dinamizan y configuran una manera de vivir y relacionarse", frente a los centros comerciales "que despersonalizan". "Mallorca es como es gracias al trabajo de estos comercios", señaló el vicepresidente, quien no obstante recomendó al sector que apueste por la "innovación y las nuevas tecnologías" para estar al día y ser competitivo.

Durante la gala se hizo entrega de los galardones Miquel Lladó de la asociación. En esta ocasión el Premi d´or fue para Sánchez Alimentación y Etika Food Solutions; el Premi Gegant fue a manos de Margarita Salvá Tomás; y el Premi al dependent exemplar recayó en los dependientes de Vitalòptics.