El consellera de Territorio y Movilidad, Marc Pons, ha anunciado hoy que el Govern colocará a tres inspectores y cuatro auxiliares de forma permanente en el aeropuerto de Palma para luchar contra el intrusismo y evitar la actividad de los autobuses ilegales que provocaron el enfrentamiento con los taxistas en la tarde de ayer.

Pons ha explicado el decreto aprobado por el Govern y que es fruto de la negociación con los diferentes sectores del transporte. Prevé sanciones de hasta 12.000 euros por los anuncios de transporte discrecional irregular, ya que no contempla que estos vehículos puedan captar clientes en la calle o en el aeropuerto. Solo pueden actuar con contratación previa.

"Se trata de una práctica que es inédita en España y es del todo irregular", ha dicho el conseller. Marc Pons también ha explicado que se regularan los vehículos de alquiler ante su llegada masiva durante la temporada turística procedentes de otras comunidades.

Además, ha anunciado también que están trabajando con un plan específico sobre el aeropuerto de Palma que empezará a operar el miércoles con el incremento de inspecciones.