-¿Cuáles son los tumores que tienen peor pronóstico de todos?
-Los adenocarcinomas de páncreas, los tumores de origen desconocido de los que hemos hablado, los tumores cerebrales de alto grado, los glioblastomas, y, en general, todos los tumores de rápido crecimiento.
-¿Alguno de ellos tiene posibilidades de curación?
-No, ninguno de ellos se cura hoy por hoy.
-Hablando de tumores cerebrales, ¿qué opina del caso Minerval
-No he oído hablar de él, no sé a qué se refiere.
-Una presunta comercialización de una molécula en fase de experimentación a pacientes con cánceres cerebrales por parte de dos catedráticos de Biología de la Universidad de estas islas que, al parecer, lo vendían asegurando que curaba o mejoraba los síntomas de los tumores cerebrales.
-Si esto es así, lo único que puedo decir es que los burros no vuelan, que no se puede engañar a la gente de esa manera, creándoles falsas expectativas, jugando con sus esperanzas.
-¿Y qué opina del hecho de que fueran dos catedráticos de Biología los que presuntamente vendieran el producto?
-Que ya no estaríamos solo ante un caso de inmoralidad, si no también ante una alegalidad y un delito porque estas personas no pueden prescribir nada. A estos casos los califican en muchas ocasiones como intrusismo profesional, pero la realidad es que hay mucho cuatrero suelto.
-Cuando a uno le diagnostican un cáncer, ¿qué es lo que hay que hacer?
-Solo tienes un camino: ponerte en manos de un servicio de Oncología médica de nivel para intentar curarte o, al menos, aumentar tu supervivencia. Y quien diga lo contrario, miente.
-¿Y si el producto ofrecido tiene grandes expectativas de ser efectivo?
-La eficacia de un fármaco debe comunicarse y demostrarse donde procede, en los foros médicos. No estamos en los tiempos de la alquimia del Medievo y es un atropello intolerable que se juegue con las expectativas de la gente.
