Impulsar y combatir las debilidades de la economía balear durante los próximos cuatro años va a tener un coste próximo a los 1.600 millones de euros, o ese es al menos el presupuesto acordado por Govern y agentes sociales dentro del Pacto por la Competitividad, con el que se desarrollarán 13 planes de actuación sectorial en ámbitos como el empleo, el turismo, el comercio o la vivienda. La presentación de esta iniciativa se vistió ayer de gala en el Consolat de Mar, con la presencia de la presidenta balear, Francina Armengol, junto a algunos de sus consellers y los máximos responsables de las patronales CAEB y PIMEM y de los sindicatos UGT y CCOO, con la que se quería evidenciar el consenso obtenido para poner en marcha este proyecto.

La reunión de la Mesa de la Mesa de Diálogo Social celebrada ayer pretendía aprobar tanto el diagnóstico realizado sobre la situación de la economía de las islas como las medidas que se quieren poner en marcha para reforzarla. La presidenta Armengol señaló que las fortalezas del archipiélago son bien conocidas (crecimiento de su producción y del empleo por encima de la media española y europea), pero no ocultó que existen también debilidades, como una pérdida de la productividad, un incremento de las desigualdades, un paro todavía excesivo y un difícil acceso a la vivienda.

Para hacer frente a estos problemas se van a poner en marcha 13 planes sectoriales, y el primero que se presentará, en un mes aproximadamente, será el de empleo. Pero a éste se sumarán otros con actuaciones sobre sectores concretos, como el turismo, el comercio, la industria y el sector primario.

Para que el crecimiento económico de Balears sea sostenible se desarrollarán también planes vinculados con la vivienda, infraestructuras hídricas y sequía, movilidad o energía. La lista incluye igualmente actuaciones en el ámbito de la formación profesional, nuevas tecnologías o investigación e innovación.

La inversión que se ha previsto para desarrollar estas medidas a lo largo de cuatro años asciende a 1.570 millones de euros.

Un punto al que se dio una especial importancia es el elevado nivel de consenso conseguido, dado que en el diseño de esta estrategia han colaborado también la Universitat, las Cámaras de Comercio, el Cercle d'Economia, las cooperativas o los Consells Insulars, entre otros, algo que Armengol utilizó para destacar la importancia que su Gabinete da al diálogo y al acuerdo, reprochando que el anterior equipo del PP no siguiera una línea similar.

Biel Barceló coincidió en poner en valor que el diagnóstico realizado disponga de un respaldo tan amplio y señaló que los tres objetivos fundamentales que se han marcado a la hora de orientar las actuaciones para los próximos años son una mejor distribución de la riqueza que se genera en Balears, la creación de un empleo de mayor calidad y la diversificación de la economía de las islas.

Respaldo social

Para evidenciar el respaldo obtenido, junto a la presidenta del Govern, el vicepresidente y el conseller de Trabajo, Iago Negueruela, comparecieron públicamente los presidentes de las patronales CAEB y PIMEM, Carmen Planas y Jordi Mora respectivamente; y los secretarios generales de UGT y CCOO en las islas, Alejandro Texías y José Luis García.

Planas fue la primera en destacar la importancia que tiene el que las empresas isleñas puedan ser más competitivas y mejorar su productividad, como vía para elevar los niveles de bienestar y generar empleo de mayor calidad.

Mora defendió la necesidad de que el crecimiento económico alcance a todos y reclamó del Govern que los 13 planes previstos se pongan en marcha con la mayor celeridad posible, al tiempo que señaló el papel clave que las pequeñas y medianas empresas deben de jugar en esta materia.

Texías aprovechó la ocasión para reclamar a las patronales que colaboren a la hora de hacer llegar la riqueza a todos los trabajadores, por considerar que éstos todavía no se han visto beneficiados por la recuperación económica.

Por su parte, García resaltó el esfuerzo que se quiere hacer en materia de Formación Profesional, entre otros ámbitos. Además, consideró que los 1.570 millones de euros previstos "son necesarios, pero no suficientes", y reprochó al Gobierno central la deficiente financiación de las islas al tiempo que calificó los presupuestos generales del Estado de "insulto" para el archipiélago.