"¿Que por qué hay que lavarse las manos? Porque es la medida más importante para evitar la expansión de los microorganismos por un hospital. Y de este manera evitaremos que la resistencia a los antibióticos se agrave", explicaba ayer Olga Hidalgo, jefa del servicio de Medicina Preventiva de Son Espases con motivo del día mundial de la higiene de manos que celebra la OMS cada 5 de mayo.

"Si nosotros (los profesionales sanitarios) nos lavamos las manos, no causaremos ninguna infección y si no hay infección, no habrá que tratarla con antibióticos generando más resistencias a estos fármacos", ata cabos la preventivista.

El mal uso de los antibióticos tanto en personas como en animales destinados al consumo humano está contribuyendo a hacer a los microorganismos más resistentes y a los primeros menos eficaces, sostiene esta profesional que advierte sin atisbo de duda que "estamos usándolos mal".

Y más sencillo que una utilización adecuada de estos antibióticos resulta el simple gesto de limpiarse con jabón las manos bajo un chorro de agua. "Es básico y hay que recuperar este hábito y lavarse las manos antes de cocinar, al tocar algún alimento crudo, después de ir al baño...", recuerda Hidalgo.

Y con el objetivo de que los profesionales sanitarios no se sustraigan a esta medida higiénica básica, el servicio de Medicina Preventiva de Son Espases ha decidido acercarles los puntos de lavado. "Hemos puesto un dispensador de una solución alcohólica al pie de cada cama en todas las habitaciones del hospital para que el personal la use antes y después de tocar a un paciente", revela Hidalgo, que admite que han adoptado esta medida porque no todos los profesionales saniarios tienen asumida la importancia de realizar esta acción.

La jefa del servicio concluye advirtiendo que las infecciones nosocomiales (hospitalarias) suponen un importante aumento del gasto sanitario en forma de más días de ingreso hospitalario.